[Tribuna] Ferias con mucha solera

Feria de San Blas hacia 1988. Fotos de Loli Gallego

LA DE SAN BLAS, EN PROAZA, ERA MULTITUDINARIA. VENÍAN GANADEROS Y TRATANTES DE TODA ESPAÑA Y SE MARCABA EL PRECIO DEL GANADO PARA LAS DE ASTURIAS

Por Loli GALLEGO

Haré un recuerdo histórico sobre las ferias de Las Candelas y San Blas, que se celebraban en Proaza los días 2, 3 y 4 de febrero desde mediados del siglo XIX. Pero su origen se remonta a la hegemonía que la Casa Fuerte de Prada tuvo en este municipio. Fue la principal Casa cuya nobleza queda manifestada en su solar de Prada, situado en los límites de Santo Adriano y Proaza, pertenecientes por tanto sus tierras a ambos territorios, de tal forma que desde tiempo inmemorial se venían celebrando dichas ferias en san Blas en las praderas de Buyera y Las Segadas. Ferias que se remontan al siglo XIV, creadas y fomentadas por la citada Casa.

Son los Vázquez de Prada poseedores de extensos territorios, no solo de los concejos citados, sino fuera de éstos, teniendo inclusive un coto que es el pueblo de Linares, emancipado en 1820. El palacio de los Prada cuenta con una capilla dedicada a la advocación de San Blas y es en honor de ese santo que se establecen las ferias con el mismo nombre. A mediados del siglo XIX y de común acuerdo con Santo Adriano, se trasladan a Proaza, pero disminuyendo en los días de celebración a partir de mediados de los años 60 del siglo XX. En mis recuerdos aparecen como días señalados las Candelas, dedicado este día a la venta de ganado vacuno; San Blas, en el que se trataba el ganado caballar y asnal y el llamado “San Blasín”, que se dedicaba al divertimento. Se reunían en Proaza gentes jóvenes de todos los pueblos del concejo y de otros limítrofes y ese día había baile en el ateneo que regentaba Angelín. La afluencia a estas ferias era multitudinaria. Venían ganaderos y tratantes de casi toda España. Toda la Cornisa Cantábrica: Galicia, Navarra, Castilla, León e incluso Valencia. Se decía que esta feria marcaba el precio del ganado para todas las que se celebraban en Asturias. Las casas de comidas eran abundantes en Proaza. Desde los restaurantes con solera hasta los pequeños chigres. Todos esperaban el día de San Blas como agua de mayo pues, si no nevaba, casi hacían medio año de ganancias. Aunque resulte prolijo enumeraré los distintos establecimientos. Empezando por El Molín, Casa Corona, Casa Faustino, Casa Jamín, Casa Amparo, Julia Boni, Araceli la Cuca, Casa Mercedes, Vicente Filomena, Concha Patallo, Casa Suceso, Pacho Corona, Casa Diego, Casa Braulio, José de Isidro, Eugenia Castañera, Casa Gaspara y, en el campo, Casa Enrique Villabrille. Es curioso ver como se trataba la compra del ganado. Los personajes eran el paisano, el tratante y dos figuras que presenciaban el trato. Uno, el mediador, que cuando no se ponían de acuerdo en el trato mediaba y normalmente, a no ser que el paisano no cediera, partían la diferencia entre lo que pedía el vendedor y lo que mandaba el tratante. Una vez realizaba la compra se pasaba a registrar al animal y si estaba en orden se marcaba como vendido. Aparte estaba la otra figura llamada el “pigarra”, al servicio del tratante, para ir delante de él y bajar el precio de la res.
Una vez terminado el trato se iba a tomar la “robla”, que pagaba el vendedor, estando invitados los que habían intervenido en el trato. Los caballos se probaban a lo largo de la carretera general. El plato típico de esta feria eran los nabos, que tenían fama en toda la provincia y se venían a comer solo y exclusivamente en estas fechas.
Terminaré con unas coplillas de Pifanio el de María Pacho Prima:

Tres ferias había en el año
Tres ferias que no va más
La Pascua, la del Cristo y también la de san Blas
Por cierto que por San Blas
había espicha de sidra
siempre tenían muy buena
Fanón y Ramón de Milia
También se comían los nabos,
con morciella, chorizo, tocín y calamona.
Los preparaban muy bien
en la Casa Pachu Corona