Un pleito del siglo XVI, clave para aclarar el uso de pastos del Aramo

La investigadora Loli Gallego localiza el legajo en un archivo de Valladolid

Servirá de jurisprudencia frente a litigios con Quirós sobre Andrúas

El alcalde de Proaza recibe el documento de manos de Loli Gallego

F. R. G. / Proaza
Una copia de una sentencia de 1599 y otras posteriores que forman un cuerpo de jurisprudencia que se custodia en el archivo de la Real Chancillería de Valladolid se encuentran ya en el Ayuntamiento de Proaza. A pesar de su antigüedad, esta documentación puede servir para defender los derechos de los vecinos del concejo a utilizar los pastos de Las Andrúas, en la sierra del Aramo. El documento fue entregado al alcalde, Ramón Fernández por la investigadora local Loli Gallego.
“Este documento fue conservado durante generaciones por los vecinos de Serandi. Concretamente lo custodiaba Antonio ‘El Coxu’ “y gracias a ese libro se ganaron muchos pleitos”, explica Gallego, aunque hace unos diez años la documentación se perdió.
La primera sentencia resuelve una querella planteada por vecinos de Las Agüeras, Santa Eulalia de Perueño, Bermiego y Serandi. Un ganadero de Tene edificó en la zona una cabaña y la Chancillería falló en contra. Posteriormente hubo numerosas prindas de ganado en el siglo XVIII en los que se vieron involucrados los pueblos de San Martín y Villamejín. La Audiencia falló a favor de los pueblos de Proaza y estableció un entorno en Los Porqueones que permitía el uso de los pastos en verano a algunos pueblos. Serandi se mostró en desacuerdo y apeló a Valladolid. En 1759 hubo sentencia firme y desde entonces Serandi puede llevar sus ganados todo el año a las Andrúas, compartiéndolos con Quirós.

Ya en el siglo XX hubo pleitos en los años 60, 80 y el último en 1994. Explica Loli Gallego que si el catastro de Montes hubiera incorporado estas sentencias “no hubiera habido más pleitos, pero no se hizo”.
La recuperación de esta documentación es muy importante para el concejo en la resolución de sus pleitos de pastos con el vecino de Quirós, explica Loli Gallego, “porque estábamos sin ninguna documentación en caso de nuevas prindas”.