La comisión de Santullano se desvincula de los disturbios
La agrupación vecinal destaca que trabaja para «la celebración anual de los festejos» manteniendo «una tradición de más de 60 años»
Redacción/Grado
La comisión de festejos de Santullano ha hecho público un comunicado en el que se desvincula de los disturbios que pusieron fin a las fiestas de la localidad, en los que intervino la Guardia Civil para proteger la vivienda de un vecino que denunció ruidos. «Esta comisión de festejos condena enérgicamente cualquier acto vandálico o que incite a la violencia, que se haya producido tras el cierre de las fiestas Sacramentales, independientemente de que éstos hayan tenido lugar fuera del recinto donde se celebraba la fiesta y por personas totalmente ajenas a esta comisión», señalan en el comunicado, en el que añaden que la comisión «en todo momento ha cumplido estrictamente la normativa vigente que rige este tipo de festejos» y que su objetivo es «la celebración anual de las fiestas de forma totalmente cívica y manteniendo una tradición de más de 60 años ininterrumpidos, en la que participa y colabora toda la Comunidad vecinal tanto del pueblo, como del municipio. Es por eso que cualquier incidente violento producido va en contra de los principios, intereses y finalidad de dicha celebración».
El incidente ha provocado un hondo malestar en la comunidad vecinal, ya que muchos residentes consideran que se trata de un suceso «lamentable» pero que se enmarca «en una relación muy conflictiva, de alguien que quiere acabar con 60 años de fiestas». Asistentes a las verbena aseguraron que durante la celebración habían recibido insultos desde la casa. «La verbena se estaba desarrollando de una manera familiar y completamente normal, y la intervención de la Guardia Civil, que llegó al recinto antes de que se produjera ningún altercado para exigir que se acabara la fiesta, cuando aún no se había sobrepasado el horario, nos ha parecido al menos llamativa, sobre todo porque en cualquier otra ocasión tardan media hora en llegar si les llamas, ya que dependemos de la comandancia de Oviedo», afirman estos asistentes a la fiesta.
Por otro lado, la familia agredida niega que haya presentado una treintena de denuncias contra particulares ante el Ayuntamiento.