El alcalde de Quirós pide un convenio para la Senda del Oso
Ovidio García reclama que los concejos y el Principado negocien una fórmula para garantizar el mantenimiento
Jesús Muñiz lamenta la «desgracia», «en seguridad toda inversión es poca»
Puente en el que está previsto mejorar la seguridad de las barandillas, en Santo Adriano
Redacción/Grado
Los alcaldes de Quirós y Santo Adriano, Ovidio García y Jesús Muñiz, también lamentaron hoy el accidente que le costó la vida a un turista de Valladolid, que recorría en bicicleta la Senda del Oso. Ambos han destacado la importancia de invertir en el mantenimiento de la Senda, y García ha pedido la negociación de un convenio entre los concejos y el Principado para establecer el marco financiero que permita hacer frente a las obras.
«En primer lugar, lamentar la pérdida de una vida y mi condolencia a la familia. La senda necesita la firma de un convenio de colaboración entre los Ayuntamientos y el Principado, que garantice un mantenimiento continuado de la misma. La vía de articular este convenio podría ser a través de la Fundación Oso, aprovechando su ofrecimiento y arraigo en la zona», señala García, que reconoce que «la senda tiene tramos peligrosos, y por ello, requiere un buen mantenimiento. El mantenimiento se debe de completar con carteles de advertencia a los usuarios sobre el riesgo de accidentes y la necesidad de extremar la precaución».
Para Jesús Muñiz, «ha sido una desgracia». El alcalde de Santo Adriano señala que en la Senda «se han hecho inversiones puntuales y siempre priorizando la seguridad, pero en materia de seguridad toda inversión es poca». Entre las obras previstas y ya adjudicadas está la mejora del puente del Plagón, en Villanueva, una de las zonas que ha suscitado críticas.
Un cartel advirtiendo del peligro
Je, je, y jeeeee, serán elecciones ó serán políticos. ……
como nos toman el pelo. Senda del Oso, Noviembre nevada.
Son evidentes todas las deficiencias aquí denunciadas e igualmente lamentable es la reciente tragedia que se cobró una vida humana.
Parece ser el momento de las lamentaciones, de las acusaciones cruzadas de culpabilidad, etcétera, etcétera.
A mi entender hacemos bueno, una vez más, aquel dicho de «acordarse de Santa Bárbara cuando llueve».
Me gustaría denunciar aquí otros riesgos que no se mencionan en este momento pero que, si Dios no lo remedia, me temo que puedan acabar siendo trágica noticia más pronto que tarde. Me refiero a los riesgos de los peatones.
He sido peatón bastante asiduo en esta senda. La pasada Semana Santa he dejado, definitivamente, de serlo. La superpoblación de bicicletas y la cada vez más mermada presencia peatonal han logrado que la Senda del Oso se haya convertido en un itinerario de riesgo (diría que de alto riesgo) para los viandantes.
No soy quien para dar lecciones sobre seguridad vial ni sobre nada. En este momento las bicicletas son una gran mayoría y los peatones más bien minoritarios. Aqellas generan actividad económica, nosotros más bien poca. Por esa razón sugeriría a quien corresponda que, sobretodo de cara a la temporada estival que se avecina, se prohibiera taxativamente el uso peatonal de la Senda del Oso. De no tomar medidas en este sentido, más pronto que tarde, acabaremos lamentando alguna desgracia. ¡Ojalá me equivoque!
Comparto la visión de que actualmente, con la proliferación de bicicletas, la senda es un riesgo para los peatones, pero no creo que la solución sea cerrarla a los «andarines».
El problema, como pasa en otros campos, es la educación. La gran mayoría de ciclistas, por supuesto, son prudentes y extreman la precaución cuando pasan cerca de un peatón, pero por desgracia hay muchos energúmenos que por salir un fin de semana por la Senda se creen que están haciendo un «sprint» en el tour de Francia. El sentido común dice que en una ruta senderista como esta, el vehículo más rápido (la bicicleta) debe siempre adecuar su velocidad a la marcha de los peatones.
Saludos.