Trubia no existe

Iván PIÑUELA

Secretario general de la AMSO-PSOE

El Pleno del Ayuntamiento de Oviedo acaba de aprobar los presupuestos municipales para 2020, con el voto favorable del PP, Ciudadanos y Vox.

El presupuesto es el principal documento municipal entorno al cual gira la actividad de nuestro Ayuntamiento. Es por tanto, el documento más importante donde se señalan los objetivos y la acción del gobierno para el año. Cierto es que el reflejo en los presupuestos no es garantía de que se puedan ejecutar todas las inversiones reflejadas, pero lo que si sabemos con certeza absoluta, es que sin estar en ellos, no se podrán ejecutar.

Por otra parte, los proyectos que nutren las inversiones de los presupuestos, no surgen por generación espontánea, son (o deberían ser) el resultado de un proceso previo de escucha con los vecinos sobre sus necesidades y problemáticas, del análisis de las posibles soluciones y de la de propuesta de la solución, y luego, del laborioso proceso administrativo que va desde la preparación del expediente y su dotación presupuestaria, a la fase de redacción de los pliegos de condiciones, y la de adjudicación y ejecución del proyecto.

En este sentido, desde el anterior equipo de Gobierno Municipal con Wenceslao López de Alcalde, se dejaron en cartera más de 100 proyectos necesarios para los vecinos de nuestro municipio, reflejo de las necesidades de los barrios.

En concreto, para Trubia, de todas las partidas recogidas en el presupuesto 2019 aprobado por el anterior equipo de Gobierno, el nuevo Gobierno de PP y Ciudadanos decidió ejecutar solamente la sustitución de luminarias. No hicieron lo mismo con otros proyectos demandados por los vecinos y también recogidos en el presupuesto de 2019, a saber: la mejora de los depósitos de Trubia (y su acceso) y de Perlavia, obras de saneamiento, reparación y arreglo de caminos (Godos, Villarín, Las Cuestas, etc), la accesibilidad de la Pasarela, la eliminación de barreras arquitectónicas, el proyecto de mejora del drenaje y prevención de inundaciones en el Pedregal y San Andrés, etc. Además, y en diferentes fases de su tramitación, estaban recogidos 4 proyectos más conocidos: el Polideportivo de Trubia (con el proyecto ya redactado), la Escuela Infantil en Soto, la reforma y adecuación del campo de fútbol de Quintana y la carretera alternativa de acceso a la Química del Nalón, para sacar del pueblo el tránsito de vehículos pesados, una obra cofinanciada por la propia empresa y el Principado.

Pues bien, ninguna de esas actuaciones le han merecido al actual equipo de Gobierno de PP y Ciudadanos consideración de estar en los presupuestos para 2020. Ninguna. Lo que implica esta cuestión es muy simple: todas esas necesarias demandas deberán esperar, como mínimo, un año más, siempre y cuando el actual equipo de Gobierno decida retomar los proyectos en el 2021. Un año en una legislatura es el 25% de la misma. Un año, y esperemos que solo sea uno, significa que Trubia no existirá para el actual equipo de Gobierno del PP y Ciudadanos. El problema es que dentro de un año, además de las necesidades de inversión señaladas, irán surgiendo otras, y no solo en Trubia, sino en todo el municipio, por lo que las perspectivas no son muy halagüeñas.

Trubia y la zona rural, necesita de inversiones continuas para evitar el deterioro. A modo de recordatorio, durante el anterior mandato, además de los proyectos señalados anteriormente y que bien podrían haberse ejecutado en 2019, se invirtió en la mejora de otras que no se ven: la conexión de tuberías de la zona oeste (Trubia) para conectar con los nuevos depósitos de El Cristo, la duplicación de las partidas para desbroces y la reparación de caminos y pavimentación de calzada, el fregado con maquinaria (hasta la fecha de exclusivo uso para el centro de Oviedo), la ampliación del saneamiento en Godos y del abastecimiento en Villar, la pista deportiva y el cierre perimetral del Parque del Ferrocarril, las obras de accesibilidad a la Pasarela sobre las vías de FEVE o el pasaje del Puente de los Señores, las obras de adecuación del local de la Policía Local, etc.

Llegados a este punto, la valoración que los socialistas hacemos de los presupuestos para Trubia es, lamentablemente, muy simple: un suspenso con avaricia, porque, permítaseme el símil académico, no solo no han contestado a ninguna pregunta, sino que ni siquiera se han presentado al examen.

Si a nivel nacional se menta que “Teruel existe” para denunciar el abandono institucional, bien lo podemos asimilar a nuestra localidad, para denunciar que, para el actual equipo del Gobierno de PP y Ciudadanos en el Ayuntamiento de Oviedo, “Trubia no existe”, y esto no lo digo yo, lo dicen, los presupuestos para 2020 del Ayuntamiento de Oviedo.