Publicado el: 23 Feb 2015

La promoción del Real Juvencia se complica al perder con el Beredi FS

Un momento del encuentro con el Beredis. Foto de Valentín Álvarez

Un momento del encuentro con el Beredis. Foto de Valentín Álvarez

REAL JUVENCIA 0 – 1 BEREDI FS

Antonio Cuestas

En Quintana, a las 16, 15 h, con el campo de juego en buen estado a pesar de toda la lluvia caída en días pasados, se inició el encuentro que no pasará a la historia por el buen juego. El Beredi es un equipo correoso, difícil de ganar, pero la diferencia en la tabla a favor del RJ – y más jugando en Quintana- no hacía presuponer lo que pasó.

¿Adiós a la promoción?

No, porque queda mucho campeonato, pero las cosas se complican, y mucho. El tercer clasificado, el Pumarín, el domingo pasado tenía los mismos puntos antes del partido con el RJ y ahora, un domingo después, ya le saca 6, tras su victoria a domicilio de hoy. Mucha distancia, no imposible, pero difícil, porque a la lucha se han unido equipos a los que hace pocas jornadas el RJ mantenía a una distancia prudencial.

Ausencia de Bujanda, gol anulado  y pérdida de nervios

El poco ordenado medio del campo del RJ notó la baja por gripe de Bujanda y estaba desconocido respecto a otros partidos.

El gol que llegó en la segunda parte dejó al RJ con margen para reaccionar, casi media hora. Y el Juvencia se puso manos a la obra. Un centro y un remate de cabeza de Cuartas hizo realidad el empate; pero el árbitro, a instancias del linier, anuló el gol equivocadamente. Muy breves instantes después Cuartas tuvo un enfrentamiento con un espectador, lo que provocó la roja directa. Un deportista, aún cuando le asista toda la razón del mundo, no debe hacer eso, se perjudica a él mismo y por ende al equipo.

Pocas opciones ya con 10 pero para más inri, a unos 10 minutos del final, Rodri, enfadado, dio un patadón al balón, desplazándolo lejos en el aparcamiento, cuando el árbitro ya había señalado saque de puerta. Segunda amarilla y expulsión dejando al RJ ya definitivamente con 9 jugadores, perdiendo, y con todo el mundo presintiendo la derrota final.

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