Grandilocuencia del Consejero.
El final de etapa de la vuelta ciclista a España en Alba es una buena noticia para Quirós, los Valles del Oso y para Asturias, sin duda. Pero de ahí a lo que nos están contando dista un abismo. Aportará las inversiones que se hagan en la carretera, publicidad durante un par de días y un fugaz aluvión de gente, que dejará mucha basura y poco dinero por la carencia de negocios capaces de rentabilizarlo.
Tenemos el vicio de pensar que somos el ombligo del mundo, o que lo vamos a ser, en virtud de la palabrería que despliegan los cuatro políticos de turno con la finalidad de vendernos inmensos favores, que en realidad tienen poco valor. Luego vienen las decepciones.
En los últimos años se nos vendieron una serie de inventos que iban a ser la revolución de ésta comarca y terminaron siendo un fiasco. Parque de la Prehistoria con un coste descomunal, Parque Natural Ubiñas la Mesa que hasta ahora sólo aportó restricciones, Teverga Pueblo Ejemplar, diversas campañas de promoción turística y ahora un fin de etapa de la vuelta. Pero el resultado hasta ahora no puede ser más decepcionante. Importante descenso en la ocupación de hoteles y casas rurales, cierres y cambio de titularidad de múltiples negocios, fundamentalmente de hostelería, descenso continuo de población y así un largo etcétera.
Mientras tanto descuidamos e incluso desconocemos los genuinos recursos que atesoramos. Somos un lugar privilegiado en España en cuanto a naturaleza y no somos capaces de venderla. La Senda del Oso no tiene interés como un sitio para circular en bicicleta, es un lugar de naturaleza impresionante donde la bici no pasa de ser un simple instrumento para facilitar la visita. El avistamiento de osos de manera organizada puede aportar ingentes cantidades de visitantes y turistas, que dejarán mucho dinero en los negocios de la zona como ya ocurre en otros lugares con menor densidad de osos. El hayedo de Montegrande y otros importantes bosques de la Comarca podemos explotarlos de manera similar al robledal de Muniellos, etc. etc.
¡Menos grillos en la cabeza y los pies en el suelo!