Alberto Fernández Gil, biólogo del CSIC, dice que debe respetarse el equilibrio natural

Beatriz Álvarez / Santo Adriano

Alberto Fernández Gil, biólogo del centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) cree que el control de las poblaciones del lobo en la Cordillera Cantábrica no se están haciendo adecuadamente. En un interesante debate celebrado el pasado sábado en la sala de conferencias del bar El Sabil (Villanueva de Santo Adriano) y organizado por el Ecomuséu La Ponte, este experto en lobos  planteó dos preguntas sobre las que giró su exposición: ¿Por qué hay que conservar a los lobos? y ¿cómo lo estamos haciendo? En relación a la necesidad de realizar controles demográficos que según Fernández Gil «por definición se hacen indiscriminadamente». el experto biólogo apuntó que «en la naturaleza no suele ser necesario controlar nada más que lo que se descontrola por la mano del hombre»

Alberto Fernández avaló con datos que los daños del lobo sólo disminuyen cuando el control demográfico supone la eliminación de un porcentaje de animales muy alto, lo que supone un alto riesgo de la supervivencia de la especie. Y añadió que «sistemas naturales muy simplificados puede tener un efecto muy significativo en las generaciones venideras.» Se plantearon en la charla muchas cuestiones para el debate sobre un animal «necesario para el equilibrio del sistema, pero con el importante colectivo ganadero en contra».

El Principado abatió seis lobos este año en Teverga, Allande y Mieres dentro del plan de control de la población y espera llegar a finales de diciembre  con 45 ejemplares abatidos. La consejería de Desarrollo Rural defiende estas medidas para “buscar el equilibrio entre la conservación de la especie y la defensa de los intereses de los ganaderos”.