Arturo Valdés, de Biedes,  se jubila después de más de treinta años domando animales de arrastre

Esther Martínez / Las Regueras

Fotos E. M.

Arturo Valdés de Miobra (Biedes), se dedica en cuerpo y alma desde hace más de treinta años a la tarea de domar bueyes para participar  en los concursos de arrastre. Durante todo este tiempo recorrió cientos de romerías con “Alegre”, “Gallardo” o “Brillante”obteniendo casi siempre los mejores trofeos.  Es la última huella que queda del antiguo oficio de carretero, que en Las Regueras pierde su última referencia.

.-“Hasta 1500 kg lograron arrastrar, pero ahora acabóse, llegó la hora de retirame”- afirma .

Sus últimos animales fueron vendidos en más de 6000 euros cada uno. Ayer, coincidiendo con la festividad del Cristo, los compañeros de este popular deporte rural, se reunieron para comer en un restaurante de Biedes para tributarle un merecido homenaje, en el que participaron más de sesenta personas entre familia y amigos. Para Arturo fue una grata sorpresa que no esperaba. Le obsequiaron con una talla de madera, una boina y una placa conmemorativa.

A partir de las cinco de la tarde once parejas de bueyes llegadas de distintos puntos de Asturias y Cantabria, participaron en una exhibición en el prado del aparcamiento del citado restaurante.

Manuel Fernández de Ferroñes (Llanera ) fue uno de los encargados de organizar el evento; dice que es costumbre  que en este homenaje participen  desinteresadamente todos sus compañeros y los camioneros encargados del transporte de los animales. Las Regueras dice adiós a su último carretero.