El instituto acogió las jornadas «Integra-t», en las que participaron los IES Roces (Gijón) y Carreño Miranda (Avilés)

Los alumnos piden reconocimiento del nivel profesional del título, que cumple veinte años desde su creación

Redacción/Santo Adriano

El IES Río Trubia acogió el pasado jueves las primeras jornadas «Integra-t» a las que se invitó al alumnado de los ciclos de integración social de Asturias, procedente del IES Roces (Gijón) y del IES Carreño Miranda (Avilés). En total, contando con los estudiantes del ciclo del IES trubieco, asistieron al encuentro 150 personas, que pudieron llevarse un recuerdo del día, ya que en la entrada se colocó un «photocall» para recibir al resto de institutos.

La primera intervención la realizaron representantes de la Asociación Asturiana para la Atención y el Cuidado de la Infancia (ASACI), que destacó la necesidad de impulsar el buen trato a la infancia y la prevención e intervención ante situaciones de violencia. En estas jornadas se centraron en la violencia sexual contra menores e hicierón hincapié en la necesidad de notificar cualquier índice de violencia.


Finalizada la primera ponencia, dos representantes del alumnado analizaron la situación de los titulados en integración social. «Con una antigüedad aproximada de 20 años, actualmente seguimos sin poseer un reconocimiento  del   nivel profesional  y laboral, lo cual pone en riesgo  nuestro futuro”, aseguró la representante estudiantil, mientras que su compañero abogó por una mayor unidad no sólo en la comunidad de profesionales de la integración, sino en todas las ramas profesionales de lo social.

Un baile en el gimnasio, preparado por los alumnos de segundo del ciclo, sirvió para calentar los ánimos, conocerse y divertir a los asistentes, antes de la última ponencia, en la que Raquel Amaya expuso un proyectop de escuela de madres y padres que está funcionando en gran parte de Asturia,s con notable éxito. Algunos de los asistentes a la escuela, y profesionales que imparten los conocimientos, compartieron sus experiencias con los alumnos, para poner punto final a la jornada.