Los defectos de la cubierta del polideportivo municipal encharcan la pista y pasan por agua los entrenamientos de los usuarios, que esperan la construcción de un nuevo equipamiento

Redacción/Grao

Regateando cubos y con mucho cuidado de no pisar ningún charco. Así han entrenado estos días los usuarios del polideportivo municipal del Trubia, con defectos en una cubierta que filtra el agua al interior del recinto. Una circunstancia que dificulta la práctica deportiva y da la razón a los vecinos, que demandan desde hace años arreglos en la estructura.

El Ayuntamiento de Oviedo, no obstante, ya cuenta con un proyecto para construir un nuevo polideportivo. Hace unas semanas, de hecho, tres representantes del equipo de gobierno municipal -los concejales de Infraestructuras, Ana Rivas, y Seguridad Ciudadana, Ricardo Suárez (PSOE), y la portavoz de IU y presidenta del distrito, Cristina Pontón- visitaron la localidad, para informar a los representantes de la Asociación de Vecinos de Trubia de los proyectos que se encuentran en marcha. La visita sirvió para enseñar a los vecinos el diseño del nuevo polideportivo, en presencia de los arquitectos autores del proyecto. El equipamiento deportivo, dispondrá, tal como pedían los trubiecos, de gimnasio en la segunda planta, y capacidad para 420 personas. A la espera de que comiencen las obras, sin embargo, los deportistas locales se las apañan para tratar de entrenar sin resbalarse.