Medio centenar de personas visita las instalaciones de la planta trubieca en una jornada especial para conmemorar su 70 aniversario

Beatriz Álvarez / Trubia

El pasado sábado con motivo del setenta aniversario de la fundación de la empresa un grupo de 46 personas realizó una visita a las instalaciones de Industrias Doy en Trubia. Durante la misma se les contó la historia de la empresa, que en la actualidad cuenta con 70 empleos directos y unos 200 indirectos. El personal relató a los visitantes, la mayoría trubiecos o de la zona, el empeño de Doy, que heredera de unas minas en Quirós, aprovechando el trazado del ferrocarril minero de Santa Marina a Trubia, vio la posibilidad de iniciar en Trubia una actividad industrial de calado que se mantiene hasta hoy. Detrás estaba una mujer emprendedora, Eudosia León, conocida familiarmente como Doy, que contó con el apoyo de su familia, en un tiempo en el que la mujer carecía de capacidad jurídica sin la firma o el beneplácito de su marido o padre.

Durante la misma el grupo recorrió parte de los 46.000 metros cuadrados que ocupa esta planta, hoy en manos de la familia Roces que se hizo con ella tras la profunda crisis de 2002 y que apuesta fuerte por este proyecto dentro del Grupo. Los visitantes pudieron presenciar un proceso de deshornado.

La empresa fabrica coque, un combustible especialmente apreciado en fundición, pero que hoy tiene muchas más aplicaciones como saneamiento, alimentación, aislamiento, … etc Actualmente Industrias Doy consume 140.000 tn de materia prima que trae de EEUU y que se transforma en unas 120.000-125.000 tn de producto para consumo industrial. De esta producción un 35% se queda en España y el resto se exporta a países como México, Japón o Pakistán por citar algunos.

«La empresa tiene un especial compromiso con el medio ambiente, realizando importantes inversiones en esta materia y también con la prevención de riesgos laborales», señalaron y añadieron que apuestan por la creación de empleo en la zona «porque somos conocedores de que es la mejor forma de vincular al trabajador al puesto y comprometerlo con la empresa». Los empleados reciben la formación en el puesto de trabajo dado que son puestos muy técnicos que requieren de gran especialización.