La Coordinadora, que ha presentado alegaciones al proyecto, destaca el fuerte impacto ambiental de estas explotaciones

El plan de investigación afecta a 7.890 hectáreas en los concejos de Riosa, Quirós, Morcín, Lena y Proaza

Redacción/Grado
Los ecologistas dan por hecho que los estudios mineros que quiere desarrollar la empresa LRH Resources en la sierra del Aramo están dirigidos a la búsqueda de oro, y destacan el fuerte impacto ambiental de este tipo de explotaciones. La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies ha presentado alegaciones al proyecto, que afecta a 7.890 hectáreas de los concejos de Riosa, Quirós, Morcín, Leña y Proaza. Los ecologistas destacan que el proyecto de invstigación ha sido presentado por una empresa  minera «asociada a un fondo de inversión y vinculada a la minería de oro».

«Este es uno más de los proyectos de investigación minera en búsqueda de oro, pero el primero que se desarrolla fuera de la zona Occidental, donde hay en estos momentos números proyectos en marcha. Una minería con un gran impacto que trabaja con rendimientos de gramos por tonelada, y que deja numerosos residuos tóxicos durante décadas», señala la coordinadora,que destaca la amplitud de los estudios mineros que se plantean, con 24 sondeos previstos en un paisaje protegido «donde ya hay abandonadas varias minas peligrosas con sus correspondientes impactos que vienen sufriendo desde hace décadas los vecinos, como son las de mercurio de Soterraña, Brañalamosa y Marramuñiz en Lena. Sorprende que se hable de ellas para indicar que hay recurso minero, nada de diga de su abandono y contaminación»,cuestionan los ecologistas.

La Coordinadora considera que el proyecto que está tramitando el Principado presenta «numerosas deficiencias», como que «no se detallan las principales alternativas estudiadas para la explotación minera en caso de su desarrollo; no se detalla la forma de realizar el seguimiento que garantice el cumplimiento de las indicaciones y medidas protectoras y correctoras contenidas. No se detalla el impacto para los vecinos de las zonas afectadas en esta amplia extensión de terreno. No se describe las características bióticas de la zona, ni se cita las especies más destacadas como es el caso del oso, que ni se menciona. La promotora no ha identificado, explicado y evaluado las incompatibilidades urbanísticas en las zonas afectadas de los 5 concejos. No se valora el impacto de sondeos en los numerosos cauces en el entorno de la Sierra del Aramo, destacando los ríos Caudal, Riosa, Xuncar, Grandiella». Además consideran que el proyecto «minimiza el alcance ambientalmente adverso de la actividad propuesta de investigación, reduciendo el presupuesto de restauración ambiental a solo 3.850 euros, cantidad claramente insignificante para restaurar nada y menos en esta extensión solo con tapar los 24 sondeos y sus plataformas».

Además, los ecologistas cuestionan la viabilidad del proyecto. «Nos preocupa que se juegue en estos momentos con la ilusión de la gente que quiere trabajar en la minería, cuando ya hemos visto casos como el Julita en Lena que al final cerraron después de crear expectativas que no fueron ciertas, a pesar de las facilidades que se le dieron para no cumplir con las normas ambientales».