Las somedanas afincadas en el concejo Geny y Fina Álvarez convocaron el sábado una reunión al estilo del «filandón» que antaño reunía al vecindario en torno al hilado tradicional

Esther Martínez/Las Regueras

El pasado sábado Geny y Fina Álvarez convocaron una reunión que para los regueranos recibía el nombre de fila y para los babianos que acudieron el encuentro, calecho.

El filandón asturiano en la zona de Las Regueras recibía el nombre de “fila” y era una reunión nocturna de mujeres para hilar en las épocas de otoño o en las largas noches del invierno. Además del trabajo manual en estos encuentros se contaban cuentos, historias o se comentaban noticias. El calecho típico de la montaña leonesa, en la zona de Babia, era una reunión parecida, pero en la que habitualmente no se realizaba ningún trabajo y a ella podían acudir tanto hombres como mujeres. Solían ser antes de la cena y eran una forma de lo que en la actualidad sería la participación ciudadana en su máxima expresión.

Las anfitrionas, somedanas y afincadas en Las Regueras desde hace muchos años, son aficionadas a los calechos que periódicamente se celebran en Babia y quisieron trasladar este tipo de actividad al concejo reguerano, concretamente a Lazana, su casa. En esta primer encuentro, el tema a tratar era precisamente el proceso de la lana. La cronista oficial, Rosa Rodríguez, intervino en primer lugar para hacer un poco de historia del lino y la lana en Las Regueras, lugares de cultivo, telares, etc. No en vano la Asociación La Piedriquina, que preside hace años organizó una exposición en Biedes sobre estas materias primas y en los anuarios que edita la asociación hay artículos relativos a estas labores.

Siguió la velada con la intervención de Paz González, de Puerma, experta en el tratamiento de la lana en todos sus procesos; lavado, hilado, teñido, tejido, etc. que ya impartió un taller en la última  Seronda Cultural reguerana y en la Casa de Cultura de Grau. Mostró tipos de lana, herramientas para los distintos procesos y una interesante charlas sobre el consumo responsable de esta materia prima.

La noche contó con la presencia de Norinin de Torrestío al acordeón y Xandru Fernández a la gaita, que amenizaron la velada, que finalizó con cantos y bailes tradicionales leoneses y asturianos. El éxito de esta primera edición animó a los presentes en convocar ya la siguiente.