El propietario del animal le dejó atado un momento con la correa a la bola del remolque para atender a su madre, nonagenaria, y su pareja arrancó la furgoneta sin apercibirse de su presencia
Redacción/Trubia
«Fue un accidente, estamos muy afectados». El vecino de Trubia cuyo perro fue arrastrado durante un tramo de la carretera entre Villarín y Trubia cuenta cómo ocurrió el suceso. «Estaba el perro conmigo y ví que mi madre se levantaba. Es una mujer muy mayor, tiene más de 90 años, y tiene demencia, así que enganché la correa a la bola del remolque de la furgoneta, y fuí a atenderla, con tan mala suerte que en ese momento mi pareja cogió el vehículo, sin apercibirse de que estaba el perro atado. Intenté avisarla por la ventana, pero no me oyó, y cuando conseguí que me cogiera el móvil, ya oí los gritos». El propietario del perro asegura que la conductora, su pareja, está muy afectada por lo sucedido. «Han tenido que darle hasta tranquilizantes». El perro es un cachorro de cuatro meses, muy revoltoso y que tiende a escaparse, «por eso lo dejé allí un momento para ir a ver qué hacía mi madre». El animal ya está en casa, tras ser atendido por el veterinario de Trubia, con algunas rozaduras y quemaduras del asfalto, pero en buen estado. La Policía Local ha informado a los propietarios de que harán un seguimiento durante un mes, para ver que está bien atendido. La Guardia Civil también se ha interesado por el suceso, denunciado por vecinos.
Deja un comentario