El programa de mejora de viviendas obreras de la formación plantea destinar a barrios obreros de Oviedo 140 millones en diez años

Redacción/Trubia

Somos Oviedo/Uviéu incluye en su programa electoral un plan de rehabilitación de barrios obreros que afectaría a tres zonas de Trubia: el grupo Coronel Esteban, en Soto; Coronel Baeza, o Corea, en La Riera, y Junigro, en el centro de la localidad. El plan diseñado por Nacho Fernández del Páramo, actual concejal de Urbanismo y candidato de la formación que lidera Ana Taboada, propone para el concejo una inversión de 140 millones de euros en diez años, con cuatro líneas de actuación: obras de mejora en viviendas obreras de alta densidad; obras de mejora en viviendas obreras de baja densidad; mejoras en viviendas del casco histórico, y en núcleos rurales. En principio, a Trubia le afectan las dos primeras líneas de inversión, dotadas según el plan la primera con 80 millones de euros, y la segunda con 20 millones. En la primera línea, entrarían los edificios de Corea y del grupo Coronel Esteban de Soto de Trubia. «La idea es acometer obras de aislamiento y de instalación de ascensores. La inversión se haría directamente por parte del Ayuntamiento, ya que son barrios y zonas que no suelen entrar en la convocatoria de ayudas. Cabe la posibilidad de contar también con financiación regional, y de buscar recursos en la Unión Europea. La idea es que el Ayuntamiento comience por la elaboración de los proyectos, y posteriormente se establecería un calendario de ejecución de las obras, por barrios y zonas». En este apartado, el plan contabiliza en todo Oviedo 2.837 viviendas construidas a mediados del siglo pasado en 16 grupos distintos y situados en barrios como Ventanielles, San Lázaro, Ciudad Naranco, Pumarín, Vallobín, Teatinos, Trubia y Tudela Veguín.

En el caso de Junigro, las viviendas entrarían en la tipología de baja densidad, para las que el plan reserva una inversión de 20 millones de euros. «Son viviendas de dos plantas, por lo que no cabe la colocación de ascensores, habría que estudiar soluciones de accesibilidad, como salvaescaleras, además de obras de aislamiento», señala Fernández del Páramo, que destaca que se trata de viviendas con interés arquitectónico, que la actuación respetaría.