La instalación depende de la Mancomunidad, que no tiene actividad ni presupuesto, y el Ayuntamiento de Santo Adriano carece de fondos para reparar una avería y hacerse cargo de su mantenimiento, que fue cedido a la Fundación Oso
Redacción/Grado
La piscina de Buyera, uno de los atractivos veraniegos de la Senda del Oso, permanece cerrada en pleno verano, lo que está restando actividad y visitantes a la principal infraestructura turística de la comarca. La instalación sufre una avería, y su mantenimiento es caro, según señala la alcaldesa de Santo Adriano, Elvira Menéndez, que destaca que forma parte de la infraestructura de la Senda del Oso, cuyo mantenimiento debería hacer la Mancomunidad de los Valles del Oso, que en su día cedió su gestión a la Fundación Oso de Asturias. El problema es que el organismo carece de presupuesto y actividad, aunque no está oficialmente disuelto, por problemas en el reparto de deuda y patrimonio entre los cuatro municipios que lo integran (Santo Adriano, Proaza, Quirós y Teverga), sobre todo con éste último, hasta las pasadas elecciones el único de la zona gobernado por IU. Desde mayo, Quirós, durante décadas feudo socialista, también tiene un gobierno de Izquierda Unida.
La situación de la piscina, que este año no ha podido abrir sus puertas, es una prueba más de la incapacidad de los cuatro concejos de mantener adecuadamente la Senda del Oso, con sus presupuestos actuales, lo que quedó de relieve tras los graves siniestros sufridos hace unos meses. En el caso de la piscina, el Ayuntamiento de Santo Adriano insiste en que no tiene competencias para hacer reparación alguna en la instalación, ya que «está cedida a la Fundación Oso y a su vez gestionada por una empresa privada».
[Información ampliada a las 17,20 horas]
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