La entidad, creada hace 13 años, repartirá sus fondos entre diversas organizaciones vecinales y culturales de la localidad
Redacción/Trubia
La Asociación de Vecinos de Trubia puso ayer punto final a sus 13 años de vida, en una asamblea en la que nadie se decidió a coger el testigo y dar el relevo a la anterior junta directiva. La gestora encargada de la asociación tras la renuncia de sus dirigentes decidió, junto a los asistentes, repartir los fondos que quedaban entre las asociaciones de Trubia con las que mantuvieron siempre relaciones de cooperación. «Día triste para los que hemos creído en un futuro mejor para nuestros vecinos. Ahora toca descansar y ver si alguien desde otra asociación quiere y puede retomar tantos asuntos como los que han quedado pendientes en Trubia: remodelación de la AS 228, con un preproyecto realizado, escuela de 0 a 3, polideportivo, inundaciones, ampliación zonas infantiles, pediatra, carretera de Perlín… «, lamenta el ex directivo de la asociación Roberto Velasco.
En la actualidad, en Trubia funciona otra asociación vecinal, ‘Trubia se mueve’.
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