El vial a Química del Nalón afectará a los chalés del Vasco

El trazado obligará a demoler los cierres de los tres pabellones y las escaleras de uno de ellos, de 1916, un impacto que el estudio ambiental considera «moderado» por el estado de abandono de los edificios

Redacción/Trubia

El nuevo vial a Química del Nalón tendrá impactos «moderados» y «compatibles» sobre la fauna, el espacio protegido del río Trubia, la calidad del aire, la geología, el paisaje y el patrimonio, y «positivos» sobre la situación socioeconómica y la población de la localidad de Trubia. Así se establece en el Estudio de Impacto Ambiental que la consejería de Infraestructuras ha sacado a información pública, hasta el próximo 18 de noviembre, para que los afectados puedan presentar alegaciones. Entre los efectos de las obras que señala el Informe de Impacto Ambiental, que puede consultarse en este enlace, está el que tendrá el vial ya en la calle Suárez Inclán, donde irá encajonado entre la estación y los pabellones del Vasco. El estudio señala que la solución elegida obligará a tirar las escaleras de entrada de uno de los pabellones, y los cierres exteriores de los tres, aunque no afectará a los edificios en sí. Los chalés del Vasco, cuyo proyecto data de 1916, están catalogados por el Ayuntamiento de Oviedo. El estudio considera que su estado de abandono hace que el impacto sobre los inmuebles sea moderado.

Respecto a la hidrografía, la  fauna y la flora, el impacto más importante se producirá durante la ejecución de las obras que afectarán al cauce del río, para construir un puente de 120 metros, «que implica la construcción de 2 pilas en dominio público hidráulico, y de los trabajos de sustitución del colector interceptor que cruza el río Trubia en la
zona del nuevo puente». El impacto se considera «moderado». En cuanto a la fauna, las obras tendrán impacto sobre «las especies vinculadas a los ecosistemas fluviales (nutria, salmón, cangrejo de río, desmán ibérico). Para el resto de las especies las afecciones se pueden suponer efectos negativos en la pérdida de zonas de nidificación para algunos paseriformes, al afectar a setos vivos, zonas de matorral y puntualmente zonas arbustivas con sotobosque. También pérdidas de zonas de refugio y alimentación serán previsibles al afectar el trazado a estos hábitats». El estudio considera «fundamental el cuidado en las fases de ejecución, minimizando la turbidez y contaminación del agua».