El PP acusa al Principado de fijar «cupos trampa» para la pesca del salmón

Los populares exigen la rectificación de la normativa, que «supondrá la eliminación del 95% de los pescadores», por la prohibición del uso de ninfas, y denuncian que la normativa supondrá una drástica reducción de pozos y posturas en el Nalón-Narcea

Redacción/Grado

El PP acusó hoy a la Consejería de Medio Rural de «mentir» a los pescadores asturianos con la nueva normativa de pesca fluvial. Los populares aseguran que aunque formalmente se mantiene el cupo de cuatro salmones por pescador y temporada, se trata de «un cupo trampa», ya que «tan solo dos de esos cuatro salmones pueden ser pescados en la zona libre, quedando el otro 50 % del cupo (otros dos) limitados a ser pescados en cotos. Esta diferencia, obliga a todos los pescadores a pagar un coto si quieren completar el cupo, lo que supone realmente ‘un cupo trampa’”.

Así lo ha asegurado hoy el diputado Javier Brea, en una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por el presidente de la asociación de pescadores El Esmerillón, Antón Caldevilla.  “El cupo no son cuatro, que no engañen a la gente”, aseguró  Caldevilla, que acusa al Gobierno de “mentir una y otra vez”.

En cuanto artes y cebos para la pesca del salmón, finalmente se prohíbe el empleo de ninfas en las zonas salmoneras a partir del 15 de junio, destaca el PP,  un señuelo artificial «que atrae a pescar a más gente, sobre todo personas jóvenes y mayores, entre otras cuestiones, porque es un cebo más barato, no requiere de la misma condición física que la mosca y no se necesita vareador». Este cambio en las artes pesqueras, destacan, afectará especialmente a los ríos de la comarca, el Narcea-Nalón, donde se reducirá, según las estimaciones del PP, el número de pozos y posturas en más del 85%, desde aguas abajo de Cornellana hasta Peñaullán, que pasará de más de 40 pozos y posturas actuales a cinco; cuatro en el Narcea y uno en el Nalón.

«Así las cosas, esta prohibición, según estimaciones de las asociaciones de pescadores, podría suponer la eliminación de 95% de los pescadores, además una concentración excesiva en los pozos y posturas restantes que probablemente se conviertan en una fuente de conflictos entre los propios pescadores, auguran.

A todo esto se añade que se han vedado tres tramos que hasta ahora estaban tipificados como libres: la Cerezalina en el Narcea, el Arco en el Sella, y la Concha en el Cares, lo que también supone una merma más de posibilidades de realizar la actividad de pesca para quienes no tengan coto, denuncian los populares, que reclaman al Principado que rectifique la normativa de pesca fluvial para el 2021 «o, de lo contrario, pediremos la dimisión del director general de Medio Natural».