El consejero de Medio Rural defiende en la Junta la necesidad de escuchar al mundo rural en el conflicto sobre la especie, «una protección integral llevará a furtivismo, envenenamientos e incendios forestales»

Unión de Campesinos Asturianos ha convocado una manifestación, el próximo viernes 26 de febrero en Oviedo frente a Delegación de Gobierno

Redacción/Grado

El consejero de Medio Rural, Alejandro calvo, hizo hoy en la Junta General un llamamiento a escuchar «a las comunidades que hemos trabajado este problema con el máximo rigor y detalle» en el conflicto sobre la gestión del lobo, cuya inclusión en el Listado de Especies de Especial Protección (LESPRE) se aprobó recientemente, lo que implicará la prohibición completa de su caza, que en Asturias está permitida para controlar la población, con ratios máximas por territorios y un total de unos 40 ejemplares al año. Em respuesta a una interpelación de Vox, el consejero aseguró estar «preocupado» por el rumbo del debate en la opinión pública, una batalla que «hemos perdido, sólo hace falta echar un vistazo a mis redes sociales». Calvo abogó por escuchar al mundo rural, «a las personas que están en el territorio» y buscar equilibrios en el conflicto entre ganadería extensiva y fauna salvaje, «parece que se cree que lo más progresista es una protección integral, pero hay que mirar, por ejemplo, lo ocurrido en Portugal. Con una protección integral se ha conseguido más furtivismo, envenenamientos e incendios forestales», aseguró. El diputado de Vox, Ignacio Blanco, criticó al Gobierno central, «que escucha a las comunidades donde no hay lobos, y desoye a las que tienen el problema» y argumentó que la protección integral supondrá, a la larga, un riesgo para la especie, «porque si no hay ganado en el monte, si se acaba con la ganadería extensiva, también se acaba con el lobo».

Por otro lado, Unión de Campesinos Asturianos ha convocado una protesta en Oviedo, el próximo viernes, 26 de febrero, a las 12,00 horas frente a la Delegación del Gobierno, en la plaza de España. Reclaman mantener la situación actual, en defensa de la ganadería extensiva y las razas autóctonas, y rechazan que la PAC asuma el pago de los daños de fauna salvaje.