El director general de Montes, Fernando Prendes, mantuvo una reunión con los residentes para informarles del procedimiento y de los cambios que conllevaría la aprobación de la petición
Redacción/Grado
Soto de Las Regueras está barajando la reclamación de su monte como Comunal en Mano Común, un procedimiento que se está impulsado en otros 33 lugares de Asturias, y que en la comarca ha culminado ya en dos pueblos, en Villamarín de Grado y en Cores, en Somiedo. Para informar sobre las condiciones que tiene que cumplir el monte para ser clasificado como Comunal en Mano Común, y para analizar con los vecinos los pros y los contras, el Ayuntamiento de Las Regueras convocó una reunión, que contó con la asistencia del director general de Montes, Fernando Prendes, y a la que acudieron una veintena de vecinos. «Nosotros como Ayuntamiento tenemos que oponernos a la pretensión, ya que el monte está registrado como municipal, de uso comunal, y lo contrario sería prevaricar. También nos parece importante que los vecinos dispongan de toda la información y luego serán ellos los que decidan si siguen adelante o no con la petición», señaló tras la reunión la alcaldesa, Maribel Méndez. La inscripción como Monte Vecinal en Mano Común no es automática, ya que debe demostrarse que tuvo esta condición jurídica en el pasado, y recibir la calificación del Jurado de Calificación de Montes.
«El director general informó a los vecinos de qué cambios habría. Ahora hay un convenio con el Principado para el aprovechamiento de una zona, en la que los vecinos se llevan el 70 por ciento, el Principado el 25 por ciento y el Ayuntamiento, el 5 por ciento, por los gastos de gestión. El resto del monte está repartido en parcelas, con el cien por cien del aprovechamiento para los vecinos que las tienen adjudicadas. Si prosperara el cambio, no se podría hacer ese reparto en parcelas, el monte debería ser gestionado en común por los vecinos, que también tendrían que asumir comunitariamente todos los gastos», resumió la regidora.
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