Publicado el: 23 Jun 2021

«La falta de ferias y el cierre hostelero tiraron el precio de la ternera»

La ganadera Natalia Rodríguez empezó de cero y hoy cría prácticamente la totalidad de su centenar de vacas, que pastan en Teverga y Grado

Natalia Rodríguez

F. Romero / Grado

Natalia Rodríguez, ganadera de 41 años de La Torre (Teverga), ama su trabajo y su pueblo. Con dos explotaciones, una en Teverga y la otra en Grado, es una luchadora que partió de cero en un mundo dominado por hombres, aunque -dice- afortunadamente cada vez somos más.

– Vive en Fuexu, pero se pasa la mayor parte de su tiempo en La Torre, su pueblo, que le tira mucho ¿no es así?

– Tengo explotación en los dos sitios, pero yo me considero más de La Torre. Lo pasé mal por irme de allí a Oviedo. Allí tengo a mis padres.

-¿Cuándo empezó?

– Sobre 2014, como joven ganadera, con 29 cabezas de ganado.

– ¿Quién le enseñó el oficio?

– Mis padres tuvieron vacas cuando yo era pequeña, luego ovejas. Yo quería aprender, me gusta el campo y la ganadería te permite administrar tu tiempo y poderlo así compaginar con mi familia. Yo elijo mis horarios.

-¿ Cómo es su día a día como ganadera?

– Pues en invierno, con el ganado en la cuadra, atiendo por la mañana a los xatos. En primavera cambia la cosa, porque tengo las vacas en los praos y hay que moverse más y en verano las subo al puerto de San Lorenzo.

– ¿Le lleva mucho tiempo atender el ganado?

– Lleva más tiempo cuando están en la cuadra en invierno. Luego, cuando están pastando hay que ir a verlas una vez al día, hay que controlar que estén bien, que no tengan una mastitis. Camino mucho y también tiro mucho de coche claro.

– ¿Cómo aprendió a ser ganadera?

– Empecé con un curso de Jóvenes Ganaderos y fui aprendiendo poco a poco. El primer año fue una tortura. Aprendí que si tienes un buen toro te quitas mucho trabajo. Durante la pandemia pudimos seguir formándonos con una app. Cuando empecé lo pasé muy mal. Y aunque hay ayudas al sector, al final entra por un lado y sale para otro. Cuando arrancas tienes que endeudarte

– ¿Cómo afectó la pandemia al sector?

– No me afectó mucho, salvo el hecho de que no hubiera ferias. Afortunadamente mi producción va en gran parte para los supermercados El Arco y para mi suegro Pepe, que es carnicero en Trubia. Ahora casi todo el ganado es de producción propia.

– ¿Y cómo está hoy a su juicio la ganadería en Asturias?

– El sector está muy estancado. Tenemos muchos problemas con el lobo. Es desesperante. Y luego, con la pandemia, al no haber ferias, los precios están por los suelos. Sin feria ni hostelería la cosa bajó mucho e influyó en el precio de la carne. Esperemos que se vaya recuperando.

-¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?

– Me gusta mucho, no tienes horario, sin jefes…me encanta subir al puerto. Mucho trabajo pero compensa.

– Ser mujer en un mundo tradicionalmente de hombres es valiente ¿Ha tenido problemas?

– Bueno, todavía en algunas cosas te miran mucho, como en las estaferias. Ha sido siempre un trabajo de hombres, aunque también ha habido mujeres antes de nosotras. Admiro, por ejemplo a las de mi pueblo, que siguen en activo a pesar de ser mayores y lo hacen muy bien. Ahora somos muchas más y creciendo.

Comentarios:
  1. Xose. dice:

    Que dice esta mujer de atender las vacas en invierno.si las manda pa estremadura.y de estremadura pal puerto directamente.hay lo dejo.

  2. Yo dice:

    Que dice este hombre que con el “hay lo dejo”( ahí lo dejo ) cree que dice verdad.

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