CSI anuncia que ha conseguido un reconocimiento oficial de exposición a agentes cancerígenos en soldadores y caldereros, lo que frenará la contratación a través de ETT, mientras Comisiones Obreras replica que es «algo que empresa y trabajadores ya sabemos desde hace 30 años, es sonrojante esta propaganda, no todo vale»

Redacción/Trubia

La Corriente Sindical d’Izquierda ha anunciado a través de un comunicado público que tras una Inspección de Trabajo ha conseguido que se reconozca el riesgo laboral específico de los trabajadores de calderería y soldadores de los talleres de la fábrica de armas de Trubia, en concreto los de Armado y Soldadura de 1 y 2 y los de Tratamientos Superficiales. La central presentó una petición a Inspección de Trabajo, que tras una evaluación ha reconocido que en esos puestos hay exposición a elementos potencialmente cancerígenos, en concreto a cromo, níquel y manganeso. El informe señala que «la empresa realiza mediciones anuales y dispone de torres de aspiración y de equipos de medición individual», aunque pide algunas medidas correctoras para mejorar la protección frente a la presencia de manganeso.

CSI asegura que ya habían intentado que se reconociera específicamente este riesgo laboral en 2018, pero que «el no estar presentes dentro del Comité de Empresa y no contar con un delegado de prevención hizo que  nuestros argumentos no fuesen escuchados», y su petición no fue respaldada por los entonces delegados de prevención en riesgos laborales. CSI destaca que con el reconocimiento se podrá reconocer cualquier proceso cancerígeno como enfermedad laboral, y que también aumentara la capacidad de los representantes de los trabajadores para pedir un aumento en las medidas de prevención. Además, añaden, en esos puestos no podrá trabajar personal contratado a través de Empresas de Trabajo temporal.

El comunicado de CSI ha sido acogido con abierta hostilidad por otra central sindical, Comisiones Obreras, que les acusa de «jugar con la salud» de los trabajadores haciendo anuncios «de algo que empresa y trabajadores ya sabemos desde hace 30 años». «Todo el mundo sabe que todo esto es algo que ya existía en Santa Bárbara Sistemas. Ya existía porque, desde que en Trubia se trabaja con aceros al cromo, en los años 90, ya se viene reconociendo el riesgo de exposición a agentes cancerígenos y mutágenos, figurando así y desde entonces en las evaluaciones de riesgos de puestos de trabajo de los talleres de soldadura. Y es por esto que desde entonces se han tomado ciertas medidas que la legislación contempla para dichos casos: Lavado de ropa de trabajo, dos taquillas separadas para ropa de trabajo y la de casa, reconocimientos específicos que incluyen análisis de sangre y orina para cromo y manganeso y placas cada dos años o los 10 minutos para el aseo antes de la salida y el bocadillo. La realidad es que este tipo de propaganda absurda trata al conjunto de trabajadores, cuanto menos de ignorantes, intentando hacer ver que hasta ahora, tanto la plantilla como la propia empresa, no éramos conscientes de con que materiales se trabaja en la fábrica, vendiendo de manera sonrojante, que gracias a la CSI la empresa se verá obligada a reconocer algo que en realidad lleva reconociendo 30 años. Desde CCOO creemos que no todo vale, y mucho menos mentir y engañar con semejante desvergüenza a la plantilla en un tema tan delicado como es la salud de los trabajadores.