Según el relato de la Fiscalía, la mujer vivió un calvario de humillaciones y agresiones durante años, en la explotación agrícola en la que vivía con su marido, su suegro y sus dos hijos mayores de edad

Redacción/Grau

La Fiscalía del Principado de Asturias solicita penas que suman más de 30 años de prisión para un procesado por insultar, ridiculizar, golpear y agredir sexualmente a su esposa durante años en Cangas del Narcea. La vista oral, celebrada ayer y hoy a puerta cerrada en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, con sede en Oviedo, quedó vista para sentencia.

El Ministerio Fiscal sostiene que el procesado (1956) estuvo casado con la víctima durante 34 años. La pareja convivía en el domicilio de su suegro, en el concejo de Cangas del Narcea, junto con este y sus dos hijos mayores de edad. Desde hace unos 8 años aproximadamente, la relación comenzó a deteriorarse, siendo frecuente que el procesado menospreciara a su mujer con constantes insultos, tales como “puta, gorda, vaga, no vales para nada, me voy a jubilar y te vas a quedar sin nada”, o bien la ridiculizaba, minusvalorando su trabajo diario en la explotación agrícola y ganadera familiar, que el procesado controla. El control se extendía también al plano económico, por lo que cada semana, el procesado entregaba a la mujer 50 euros para la compra semanal.

Además, el procesado le reclamaba insistentemente mantener relaciones sexuales, en cualquier circunstancia, incluso estando ella lesionada o en presencia de los hijos, produciéndose episodios violentos y forcejeos, hasta el punto de que ella tomó la determinación de dormir en habitaciones separadas y colocó en la suya un cerrojo para impedir la entrada a su marido, lo que no fue obstáculo para que el procesado persistiera en su intención, según relata la Fiscalía.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de agresión sexual en grado de tentativa, por el que pide la pena de cinco años de prisión y la inhabilitación especial y la prohibición de aproximarse a la víctima a menos de 500 metros durante ocho años; dos delitos de agresión sexual consumados, por los que pide la pena de doce años de prisión para cada delito; otro de maltrato habitual por el que pide tres años de prisión y un último delito de maltrato de obra, por el que pide nueve meses y un día. El Ministerio Público aprecia que existieron las circunstancias agravantes de parentesco y de desprecio de género. Por último reclama que indemnice a la víctima con 10.000 euros por daños morales y psicológicos y abone las costas procesales.