Publicado el: 31 May 2022

Cuando Quirós era minero y en Santa Marina «había un chigre en cada casa»

El cronista oficial del concejo, Roberto Fernández Osorio, ofreció una interesante visita guiada desde el Museo Etnográfico hasta la localidad minera quirosana

Alba Rodríguez, directora del MEC y Roberto F. Osorio dan la bienvenida a los participantes en la ruta

Beatriz Álvarez/ Quirós

El pasado sábado y prolongando la celebración del Día de los Museos, el Museo Etnográfico de Quirós organizó una ruta guiada por Roberto Fernández Osorio, cronista oficial del concejo, desde las instalaciones del MEQ hasta Santa Marina. A lo largo de la ruta, de unos 3,5 km de longitud y que se adaptó a todos los presente, los participantes, muchos de ellos quirosanos interesados en la historia industrial y minera del concejo, pudieron escuchar las explicaciones y admirar el pasado más cercano y próspero de Quirós. Partiendo de las propias instalaciones del museo que se asienta sobre unos antiguos altos hornos, Osorio fue explicando por qué surge la minería en el concejo. La ruta continuó hasta el lavadero del Llagarin y de allí al Molinón, donde en la actualidad existe una plantación de arándanos y donde vivió el primer maquinista francés que manejó una máquina de vapor en el concejo. Desde allí y siguiendo la Senda del Oso se llegó al cementerio donde el cronista oficial quirosano explicó la existencia de un cementerio civil y les habló de la situación de los maquis en el concejo. A la altura de Bárzana sel guía explicó cómo había sido el crecimiento y el desarrollo del pueblo a partir del auge de la minería y desde allí, en dirección a Santa Marina la siguiente parada fue la cascada de las Cruces; a la altura del actual polígono industrial hubo tiempo para recordar el antiguo ferrocarril minero y sus máquinas, Ramona y la Estrada, y ya en Santa Marina, “pueblo minero por excelencia donde en cada casa había un chigre”, se dirigieron a visitar el Memorial por la muerte de seis mineros en Mina Mariquita y desde Mina Mariquita al Cribu.

Los participantes quedaron muy contentos con la experiencia. Se da la circunstancia de que todo este recorrido puede hacerse sin desviarse de la Senda y siendo tantos los visitantes que se acercan a la misma no está de más explicar la cantidad de patrimonio industrial (no solo patrimonio natural) que está al alcance de todos.
La idea es que la ruta se repita en el tiempo y que llegue al mayor número de personas.

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