Por Manuel Galán

Hotel Flórez Estrada

Somiedo, destino ideal de ecoturismo

Cada 18 de octubre se celebra el Día Mundial de Protección de la Naturaleza con el objetivo de crear conciencia sobre la necesidad de cuidar el planeta y la conservación del medio natural. El 17 de octubre es el día mundial de lucha contra la pobreza. Caprichos del destino.

Disfrutar de la fauna y la flora en todo su esplendor y desarrollar un turismo responsable es posible y un modelo que cada día cuenta con más adeptos, guardianes y practicantes.

Somiedo es un referente de Ecoturismo. En 2020 lograba el certificado del Sistema de Reconocimiento del Turismo de naturaleza en la Red Natura 2000. Una distinción con que supone un impulso para el conocimiento de la red, que en Asturias supone un 30% de su superficie. Asimismo, implica el fomento de un turismo de naturaleza sostenible y compatible con objetivos de conservación de los valores naturales de dicha red.

Todo va encaminado, en definitiva, a lograr la excelencia y la calidad turística, y proyectar una imagen de Somiedo óptima en cuanto al cuidado del medio ambiente.

Promoción internacional

El certificado abre las puertas a la promoción internacional y se trata de una herramienta de importancia estratégica para la conservación de la biodiversidad.

Entre el 23 y el 29 de septiembre, más de diez operadores turísticos especializados en ecoturismo y turismo de naturaleza procedentes de Alemania, Noruega y Holanda han podido conocer Somiedo en un viaje de familiarización. La organización de este viaje ha corrido a cargo de la Asociación de hostelería y servicios turísticos de Somiedo, junto a las oficinas españolas de Turespaña en Munich, Oslo y La Haya, el Club Ecoturismo en España (Club) y Turismo de Asturias.

Gracias a esta iniciativa los operadores turísticos han disfrutado actividades y experiencias de observación de fauna y flora, cultura y tradiciones, etnografía, geología y senderismo interpretado, entre otras. Un interesante programa con el que han podido descubrir cómo se está trabajando en el concejo para planificar y gestionar un turismo sostenible compatible con conservación del Parque Natural y Reserva de la Biosfera de Somiedo.

Todas las empresas turísticas que han participado en el viaje -Somiedo Experience, Hotel Palacio Flórez-Estrada, Asturias Walks, Apartamentos Rurales Buenamadre y el Restaurante Castillo del Alba- están adheridas al Club y al Sistema de Reconocimiento de la Sostenibilidad del Turismo de Naturaleza en la Red Natura 2000, impulsado de manera conjunta entre el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Serán más empresas en poco tiempo y, si nos lo creemos e invertimos tiempo, el molde ayudará a nuestros fines, pero si solo esperamos ver en qué nos beneficia, seguramente volveremos a antiguos vicios de viajas marcas y no quedará más que el sueño de lo que pudo haber sido. Está, en buena parte, en nuestras manos, pero no solo.

Un paraíso comprometido con el territorio

El Parque Natural, declarado en 1988, el primero de Asturias, y la Reserva de la Biosfera de Somiedo, declarada en el 2000, ocupa una superficie de 291 km cuadrados, de los cuales casi la cuarta parte está cubierta por bosques, especialmente por hayedos. Se trata uno de los espacios naturales protegidos más valiosos de la Cordillera Cantábrica por su alto grado de conservación y la gran diversidad ambiental y paisajística única.

Está formado por cinco grandes valles glaciares que recorren el Parque, descendiendo desde los 2194 metros hasta los 300: Saliencia, Valle de Lago, El Puerto, Perlunes y Pigüeña. En ese recorrido se localizan cuatro grandes lagos, entre ellos el mayor y el más profundo de la Cordillera, y casi una veintena de lagos más pequeños y lagunas, además de amplias praderas y pastizales calizos que alimentan a una amplia cabaña bovina y a una variada fauna salvaje con el Oso Pardo como emblema del Parque, pues aquí se inició su recuperación.

Otro de los grandes valores del Parque son las brañas con cabañas de cubierta vegetal, comúnmente llamadas teitos, y las más antiguas con pequeñas construcciones circulares llamadas corros o chozos.

Somiedo está comprometido, ratificada con su integración en la Red Natura 2000, con la recuperación y puesta en valor del patrimonio natural y etnográfico para su uso turístico, la mejora de la oferta y la creación de productos respetuosos con el medio y la promoción y comercialización del destino turístico. Sin embargo, tiene que abordar una necesaria promoción de actividades regulares avalado por la Comisión del Plan de Sostenibilidad. El regreso del antiguo Director del Parque Natural dará, sin duda, más compromiso y estabilidad al grupo de trabajo, así como coherencia a las actividades de promoción turística más allá de las obras de infraestructura. Incorporar a los grupos locales es clave para el éxito del plan y me consta que es uno de los grandes retos durante la ejecución del plan de sostenibilidad turística. El declive del asociacionismo y la falta de participación ciudadana vinculadas, aunque no solo, al despoblamiento, merman la capacidad para sumar otras voces, nuevas presencias en los grupos de trabajo. Renovación necesaria. La Red Natura puede ser el empujón para rescatar al movimiento asociativo somedano aunque el camino no es fácil.

El Club Ecoturismo en España, una iniciativa pionera

El Club Ecoturismo en España, uno de los clubes de producto turísticos apoyados por la Secretaría de Estado de Turismo desde 2010, ofrece experiencias de ecoturismo en espacios naturales protegidos. Y lo hace garantizando al viajero su contribución al desarrollo local y a la conservación de la biodiversidad. Actualmente agrupa 27 destinos y más de 600 empresas que, bajo la marca SoyEcoturista, asumen su compromiso con el desarrollo sostenible.

Las claves para ir avanzando en el impulso del Ecoturismo en España son tratados anualmente en el Congreso Nacional de Ecoturismo. La VI edición se está celebrando en las Mariñas coruñesas entre el 18 y 20 de octubre, destino adherido al Club Ecoturismo y un referente internacional en sostenibilidad que supone un marco idóneo para retomar esta importante iniciativa. Merece la pena que le demos una vuelta al concepto de sostenibilidad vinculado con las realidades sociales que nos toca vivir en nuestros territorios.

Protección del medio y pobreza

La protección del medio natural y la lucha contra la pobreza son elementos conectados. Según el último informe de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza, EAPN, Asturias es la Comunidad Autónoma en la que más ha crecido el porcentaje de personas en situación de riesgo de pobreza y/o exclusión social desde el 2015 y la tercera en la que más ha crecido desde el 2008. En la actualidad hay 266.101 personas en situación de riesgo de pobreza y/o exclusión social en Asturias. Casi 30.000 personas más que en 2015. En nuestros territorios rurales, no lo olvidemos, también aumenta la desigualdad social y las bolsas de pobreza, pero son alternativas reales a la ciudad en clave de generación de alternativas de vida más saludables y menos costosas. Tener presencia activa en el territorio y comprometernos con el medio es, también, luchar contra la ignorancia que ha provocado calamitosos incendios en nuestro territorio o demandar a nuestros representantes políticos invertir en el medio rural. Como hemos visto en la XIII edición de los Premios nacionales de excelencia a la innovación para mujeres rurales que concede anualmente el Ministerio de Agricultura, mujeres que guardan la naturaleza abordan campos tan diversos como la comunicación, la alimentación, los cuidados y la educación. Mujeres premiadas de las Regueras, Belmonte y Cabranes que ejercen, como nadie, de protectoras del medio que habitan.

Quizás, tras estos sinuosos y extraños meses, se nos presenta una oportunidad, un nuevo paradigma en el sector turístico donde el fomento del comercio de proximidad, la responsabilidad social real, el compromiso con el territorio y la reducción de la huella de carbono definirán nuestra política y el perfil de nuestros alojamientos. La neutralidad en las emisiones me parece un cuento difícil de creernos, sinceramente, aunque como la utopía, sirva para caminar. Por eso prefiero hablar de responsabilidad en lugar de sostenibilidad. Caminemos. Lo que es cierto es que quien viaja demanda, cada vez más, empresas que apuesten por la diversificación, el compromiso social, medioambiental y cultural con los territorios. Esto, al menos, nos debería interrogar en nuestro quehacer diario, en la forma en la que estamos haciendo las cosas y en cómo podríamos ser un poco mejores protectores de la naturaleza y promotores de los valores de nuestros territorios.