Un centenar de palistas se dieron cita en la competición que organiza desde hace más de 30 años el Club Piragüismo Moscón, que finalizó con una comida de hermandad en la que se aprovechó para ofrecer a los visitantes lo mejor de los excelentes productos de Grau

C. P Moscón/ Grau

“El rio más chulo de Asturias y la carrera que más presta remar” Así se referían los aficionados al Descenso del Medio Nalón en los grupos de WhatsApp. Pasiones aparte, lo cierto es que, entre el manido cambio climático y el desarrollo del calendario de competiciones próximo a las fechas estivales, los ríos asturianos suelen presentar poco caudal y las tácticas de carrera giran en torno al paso de esta o aquella “sequera”. El rio Nalón entre las localidades de Valduno y San Román de Candamo permite a los aficionados y deportistas disfrutar de un singular tren de olas y rápidos y surfear las corrientes en grupos de varias embarcaciones. El Club Piragüismo Moscón lleva desde 1990 organizando esta prueba con algunas interrupciones por distintos motivos, pero siempre con la intención de atraer a la mayor cantidad de participantes y colaboradores.

Lógicamente en 33 años se han producido cambios, explica Iván Estrada presidente del club, «pero tenemos varias señas de identidad intocables ya instauradas por mi padre Titi. La comida final es un acto de confraternización entre los propios miembros del club y la gran familia del piragüismo asturiano. Aquí buscamos, desde el deporte, promocionar Grado y dar a conocer nuestros productos típicos y nuestra oferta de servicios. Embutidos de Milio, tocinillo de cielo de Tejeiro, galletas de La Triunfante y bollos de Ferreras son algunos ejemplos. Los trofeos de mimbre hechos a mano por el artesano local de Cestería Grado son otro ejemplo. Todo ello queda enmarcado en una jornada festiva en la terraza Bambú a cargo del conocido hostelero moscón Germán Cuervo y da una idea, a todos nuestros invitados, de lo que es nuestra villa y lo orgullosos que estamos de ella».

La decimosexta edición del descenso volvió a congregar a numerosos equipos de Asturias, Galicia, Castilla y León y Cantabria hasta completar un centenar de palistas. La prueba estuvo dominada de principio a fin por el K2 de los favoritos Álvaro Fernández Fiuza y Fernando Fernández Martínez del Oviedo Kayak, que llegaron a tener una ventaja de más de un minuto sobre el grupo perseguidor donde se disputarían las dos otras plazas del pódium entre la dupla canguesa de Oscar Martínez y Eloy Palacios y la de David Machado y Diego Fernández de Los Cuervos de Pravia. En K1 fueron los veteranos los que demostraron que, en este deporte, cuenta mucho la experiencia. Rafael Carril recorrió los 17Km en una hora demostrando un estado de forma excepcional e imponiéndose al también veterano Javier Otero y al riosellano Pedro Gutiérrez, otro especialista en ríos. Todos ellos hicieron valer su destreza en el aprovechamiento de las corrientes para imponerse a uno de los mejores palistas nacionales como es Javier López del club Los Cuervos de Pravia que ocuparía la tercera plaza del pódium en categoría senior. En categoría femenina Laura Cabanas, que ya había vencido el año anterior realizando el recorrido corto, volvió a vencer enfrentándose en esta ocasión a la dureza de los 17 Km de rápidos. Para los más pequeños, mixtos y canoas la salida se realizó desde el puente de Sandiche. Los cadetes del Oviedo Kayak la Ribera coparon el podio en categoría masculina y femenina K1, mientras que en K2 la victoria se repartió entre Gorilas de Candás y Gaitero de Villaviciosa. En cuanto a los palistas locales, destacó Mª Teresa Lázaro del Moscón de Grado que venció en K1 veterano B. La entrega de trofeos corrió a cargo de la concejala de Deportes Lorena Álvarez Cabo que conminó a todos los organizadores y colaboradores a seguir trabajando para que la prueba se siga asentando en el calendario nacional.