Exhibición de Yoshua Cienfuegos por los diez años de sus ‘Estancias Coreográficas’
El coreógrafo de raíces quirosanas protagoniza una muestra en el auditorio y ofrece mañana en el Campoamor una actuación
Yoshua Cienfuegos, durante una de las clases magistrales de las ‘Estancias Coreográficas’ del Campoamor/ Beatriz Álvarez
Beatriz Álvarez/ Oviedo
Estancias Coreográfica de la mano de Yoshua Cienfuegos, coreógrafo de raíces quirosanas, ofrece al público una exhibición el próximo domingo 30 de julio como resumen de su investigación coreográfica. Con motivo del décimo aniversario, el Auditorio ha acogido entre los días 27 y 30 de julio la muestra «Escenografía Expositiva» en la que se puede disfrutar de intervenciones artísticas en vivo.
La décima edición del programa Estancias Coreográficas, que coloca a Oviedo en el punto de vista de la danza gracias a la presencia de lo más granado del panorama internacional de este arte (coreógrafos, bailarines, artistas plásticos y compositores) pondrá el broche de oro este domingo con entrada libre, 30 de julio, a las 19:00 horas, en el Teatro Campoamor, con la puesta en escena de un resumen del proyecto coreográfico desarrollado con motivo de este aniversario. Para celebrar estos primeros 10 años del programa, el Auditorio ha acogido del 27 al 30 de julio la muestra «Escenografía Expositiva» comisariada por el artista asturiano Vicente V. Banciella en la que se han podido ver intervenciones artísticas en directo aí como conocer la obra de Alfonso Pérez, «El costurero ecléctico» de la edición de 2021, entre otras sorpresas. El acceso en el Auditorio es libre en horario de 17 a 19 horas.
Según ha detallado el director del programa, Yoshua Cienfuegos, de forma paralela al trabajo coreográfico varias investigadoras del equipo de Investigación de MACOM de la Universidad Politécnica de Valencia desarrollan en esta décima edición un estudio sobre la actividad neuronal del intérprete, lo que permite realizar ya no solo «una investigación cualitativa, sino cuantitativa sobre la danza y los procesos de los bailarines». Según ha explicado Isabel Bellido, una de las investigadoras, «gracias a unas diademas , que son una electroencefalografía portátil, se captan las ondas cerebrales de los bailarines que nos permite registrar datos con los que podemos identificar en qué momentos y en qué lugares la música, el baile o incluso el propio bailarín ha podido tener alguna serie de estímulos (…) y conocer los beneficios para la salud».
A lo largo de estos diez años, el programa «Estancias coreográficas» ha visto pasar por las salas de ensayo a más de cuatrocientos bailarines y coreógrafos nacionales e internacionales entre los que se encuentran varios premios nacionales de danza, como Iratxe Ansa y Olga Pericet. Fruto de estas ediciones se han conseguido publicar cinco libros y numerosos artículos científicos que sirven de base para la divulgación, la pedagogía y la creación artística. Un proyecto que madura y cuya casa de acogida es la ciudad de Oviedo y su emblema el Teatro Campoamor.
