San Claudio: volver tras 50 años
Antiguas alumnas de las escuelas del pueblo se reencuentran, tras medio siglo de historia
Las antiguas alumnas en una imagen de su reencuentro
Beli Díaz / San Claudio
Pues que nos hemos reunido después de más de 50 años un grupo de 68 antiguas alumnas de las escuelas de San Claudio. Llevábamos tiempo intentándolo pero debido al trabajo y las responsabilidades de la vida no ha sido posible hasta ahora. Dicho reencuentro lo hemos celebrado con una eucaristía en la iglesia parroquial de Santa María de San Claudio, oficiada por nuestro párroco Don Abundio y cantada por el grupo folklórico Xuno, de San Claudio, donde hemos tenido el recuerdo por aquellas compañeras que formaron parte de nuestro paso por estas escuelas y que desgraciadamente no se encuentran entre nosotras y también por las que no han podido venir por algún motivo.
Al finalizar nos hemos trasladado al Bar Las Palmeras donde hemos disfrutado de la comida con anécdotas, risas, recuerdos, bromas…
Este reencuentro nos permitió dar marcha atrás, hemos tenido trocín del pasado y del presente. Nos sentimos niñas otra vez sentadas en aquellos pupitres de madera mientras la maestra explicaba, viendo el mapa de España al frente, la foto de Franco a un lado, el crucifijo al otro, ese globo terráqueo encima de la mesa de la maestra y recordando tantas cosas.
Esa primera cartilla de rayas donde hicimos nuestros primeros palotes, esos juegos de niñas: la gallinita ciega, la goma, el corro de la patata, a vestir mariquitas de papel, al pañuelo, a saltar a la comba, al cascayu, en fin, a cantidad de juegos socializadores y placenteros que muchos ya han desaparecido, pero que dejaron en nosotras momentos de diversión.
Esos libros, el Rayas, la enciclopedia Álvarez,
Los problemas de aritmética y caligrafía de Rubio.
Esos castigos físicos cara a la pared con los brazos en cruz.
Esas faltas de ortografía en un dictado, cada una copiarla 100 veces.
Aquellos meses de Mayo, mes de las flores, cantando «venid y vamos todas, con flores a María, con flores a porfía, que madre nuestra es».
Esas tardes de labores manuales, haciendo manteles de punto de cruz y bolsas de pan.
Esas maestras en el recuerdo: doña Cándida, doña Casilda, doña Hortensia, doña Enriqueta.
Todo esto y mucho más lo hemos revivido este pasado sábado, 4 de noviembre, en San Claudio.
