Redacción/ Grau
Yernes y Tameza, el concejo con menos población de Asturias, ha perdido su último chigre, el bar La Bolera, que cerró sus puertas esta semana por orden del Ayuntamiento. El establecimiento, ubicado en la antigua escuela de Yernes, era regentado desde el 2018 por Yoana López, a la que se le notificó un decreto de Alcaldía por el que tenía que dejar el local libre el 13 de febrero. López, que había logrado dinamizar el pueblo organizando fiestas y eventos como grandes corderadas, reconoce que ya había acabado el contrato de arrendamiento, previsto por un máximo de cuatro años, y que continuaba en precario. Había pedido en dos ocasiones un nuevo contrato, pero finalmente su petición ha sido rechazada, alegando que el edificio tiene deficiencias que hay que arreglar, unas obras que acometerá el Ayuntamiento para volver a sacar el bar a concurso.
La medida ha sido acogida con malestar por parte del concejal Manolo Tamargo, «ahora el concejo se queda sin chigre, es lamentable que las cosas se hagan sin corazón», afirma.
La diputada Sandra Camino y el concejal moscón José Ramón González visitaron la pasada semana…
El fuego se declaró de madrugada y calcinó una habitación, el desván y la cubierta…
El Ayuntamiento moscón limpiará también la maleza y abrirá fajas auxiliares contra incendios, con medios…
Bomberos de Proaza y La Morgal sofocaron de madrugada el incendio, que no ocasionó daños…
La exalcaldesa de Belmonte, Rosa Rodríguez, fue homenajeada recientemente por amigos, vecinos y compañeros en…
Más de 80 kilómetros del Camino Primitivo de Santiago transcurren por nuestro territorio, entre Oviedo,…
Ver comentarios
Desde Villaviciosa lamentamos el cierre pues pasamos en moto de ruta y nos encantaba el lugar.esperamos que reabra lo antes posible.saludos
El Bar es de titularidad municipal, por tanto, para poder regentar el bar es necesario ganar una licitación pública. Los contratos públicos tienen una duración determinada POR LEY. Si se finaliza el contrato, tiene que volverse a sacar a licitación, como así ordena nuestra Ley, la cual recomiendo que se la lea todo concejal. El Bar se cierra para poder arreglarlo y sacarlo en perfecto estado, para que el nuevo inquilino (el que gane la licitación pública) pueda desarrollar correctamente su labor. Bien hecho por parte del Ayuntamiento esperar a la finalización del contrato, y no hacerlo durante la duración del mismo, puesto que ahí si perjudicaría a la regente.
El bar no desaparece, cierra para ejecutar sus obras y volver a sacarse a licitación pública.
Es la LEY.
Pueblo sin chigre, pueblo que desaparece.
Otro ayuntamiento haciendo su trabajo.