El ejemplar fue soltado en Barréu, el mismo territorio donde había sido encontrado por un vecino con un ala rota, el pasado mes de diciembre

Redacción/ Grau

Un agente del Medio Natural y un veterinario de la Consejería de Medio Rural y Política Agraria han liberado en la localidad tinetense de Barréu un ejemplar de milano real (Milanus milvus) que ha permanecido ingresado durante tres meses en el Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre de Sobrescobio. El ave porta un dispositivo GPS para participar como centinela en un estudio que evaluará la adaptación al medio de los animales tras ser liberados y el riesgo de colisión con aerogeneradores y redes eléctricas. También se hará seguimiento de posibles envenenamientos.

El ave fue recogida por los agentes del Principado el 2 de diciembre gracias al aviso de un vecino de Barréu, que alertó al 112 Asturias de su presencia en el suelo, incapaz de levantar el vuelo. El animal, que presentaba fracturas aparentes del ala y la garra izquierdas, así como una lesión perforante en el pico y heridas asociadas a fracturas, fue trasladado a las instalaciones de Sobrescobio para su recuperación.

Un estudio radiológico permitió confirmar y caracterizar las fracturas y descubrir dos perdigones de caza menor como causa aparente de sus heridas. Se le practicó una operación para estabilizar las fracturas mediante agujas intramedulares y fijadores externos y durante la intervención se le retiraron los dos perdigones.

Tras la confirmación radiológica de una evolución favorable de las lesiones y la correcta osificación, se retiraron los últimos fijadores externos el 9 de enero. El ave empezó a apoyarse y caminar sobre sus garras e incluso a realizar pequeños vuelos en cuanto se trasladó a un voladero, el 17 de enero. La completa recuperación de sus lesiones permitió su paso a las instalaciones exteriores el 2 de febrero, para concluir la fase de musculación y alcanzar un estado idóneo para su reintroducción en el entorno natural.

Antes de su liberación, el milano fue dotado con un dispositivo GPS para su monitorización, lo que le permitirá participar como ave centinela en el proyecto del Instituto Mixto de Investigación de Biodiversidad, en colaboración con el Principado, para evaluar cómo los animales rehabilitados se adaptan al medio tras ser liberados. Este trabajo analizará también  los movimientos  de las aves para conocer el riesgo de colisión con los aerogeneradores y redes eléctricas, y estudiará posibles envenenamientos de las aves rapaces. Esta investigación se inscribe en un proyecto liderado por la Universidad de Oviedo, que cuenta con financiación de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.