El pueblo, con ocho niños en edad escolar, una ganadería y un vecino que teletrabaja, no ha sido incluido en el despliegue, «no nos dan ninguna explicación»

Redacción/ Grau

La empresa Adamo ha concluido el despliegue de fibra óptica en el concejo de Grado, pero hay un lugar al que esta tecnología de Internet de alta velocidad no ha llegado, dejando a los vecinos excluidos de la red sin explicación alguna. Y no es una aldea sin actividad: tiene ocho niños en edad escolar, una ganadería activa (con toda la burocracia online que hoy día conlleva) y un vecino que teletrabaja, además de más residentes que esperaban poder acceder a este servicio con normalidad. «Cuando hace dos años salió el anuncio del despliegue de fibra óptica quedamos encantados, porque tenemos un servicio por satélite que falla mucho y no es la primera vez que tenemos que engancharnos al internet del móvil para poder hacer cualquier cosa. Pero ahora vemos que ha llegado a todos los pueblos del entorno, y aquí no tienen previsto el despliegue». Los vecinos han presentado un escrito al Ayuntamiento, que no se hace cargo de la omisión, ya que se trata de un contrato estatal. «Nos dicen que al parecer el Ministerio no incluyó el pueblo en el contrato, pero nosotros en su momento vimos que sí figuraba en el listado. El caso es que ni el Ayuntamiento ni la empresa, que nos da largas, nos dan ninguna solución», denuncian los afectados. A la entrada del pueblo hay colocada una CTO (Caja Terminal Óptica) pero no se ha desplegado el cable que permitiría que el servicio llegase efectivamente a las viviendas. «No entendemos esta tomadura de pelo», concluyen los afectados.