Ganaderos y tratantes denuncian colas por el recorte de horarios del veterinario de Tineo

El cierre del servicio regional los martes obliga a desplazarse a Allande y dificulta la venta de ejemplares en el mercado de Siero

L. S. N./ Grau

Ganaderos y tratantes sufren desde hace ya tiempo un recorte en los horarios del servicio regional de veterinario en Tineo, que cierra los martes y obliga a tramitar las guías para el movimiento de ganado en el cercano concejo de Allande, en Siero. El problema fue denunciado ayer por el sindicato USAGA, cuyo secretario general, Fernando Marrón, alertó de que la falta de este servicio y los retrasos burocráticos en las certificaciones de la vacunación de la lengua azul está generando problemas en las ganaderías. Jorge el Calín, de La Espina, lo sufre en su día a día. «Para ir al mercao de Siero el ganado tiene que tener las guías veterinarias con todos los certificados de vacunación, pero con el cierre del servicio en Tineo los martes se hacen colas enormes en Allende. El otro día mi mujer estuvo hasta las cuatro de la tarde para inscribir 200 reses, con la consiguiente molestia para otros ganaderos con menos cantidad de ganado. Todo son trastornos para conseguir la documentación necesaria para ir los jueves a Siero, parece que los ganaderos y tratantes no tenemos derecho a tener vida y poder organizarnos». Uno de los problemas está en que los veterinarios no hacen guías para asentar al ganado en el CEA de los tratantes, que reciben a las reses sin su guía oficial, solo con el MD (el certificado que permite el movimiento interno de ganado dentro de Asturias), pero tienen que tramitarla de cara al mercado ganadero semanal de Siero. En concejos con mucho volumen de ganado, como Tineo, se crean cuellos de botella, agravados por el cierre un día a la semana del servicio. «A esto se suma el retraso en la grabación de las vacunaciones. La vacuna la pone el veterinario de explotación, pero es la consejería la que tiene que inscribirla para que figure en la guía. El otro día encontramos que había vacunaciones hechas ya hace quince días que estaban sin grabar, y esas reses no pueden ir al mercado», resume.