Adiós al quirosano Esteban Viejo, de Tene
Pastor y artesano de la madera, su pérdida deja un gran vacío en el concejo
Esteban de Tene, con una de sus obras
Por Beatriz Álvarez/ Quirós
Despedimos hoy a una persona generosa, Esteban de Tene, Esteban Viejo, miembro de una familia muy conocida y querida en el concejo. Y lo despedimos con pena por la partida, pero sobre todo por la pérdida que supone el fallecimiento de una persona entrañable y uno de los artesanos más interesantes del concejo. La primera vez que contacté con él escribí una entrevista muy amplia para un medio de comunicación, yo no lo conocía y aquel día Esteban nos abrió su casa y sus recuerdos, nos convidó a sidra y nos dejó entrar en su particular y personal museo lleno de obras realmente originales. Como anécdota de aquel día contar que no funcionó la grabadora y tuve que volver al día siguiente. Ayer releía esta entrevista recreándome en la suerte de haberle conocido, de haber conocido a tantos y tantas que depositaron en mi su confianza para contar su historia, sus historias. Muchos de ellos ya no están, pero me quedan sus palabras. Esteban era especial, era especial por su ternura de hombre mayor, soltero viviendo con sus hermanos, mellizo de otro hombre íntegro y honesto, Pedro con el que también he tenido la fortuna de tratar. No hay palabras cuando las lágrimas se agolpan y pelean por salir.
Con Esteban perdemos a un vecino que apostó por la forma de vida más tradicional que conocemos. Esteban el pastor que dibujó con la navaja la naturaleza fantástica que le abelugó en vida y que llora su muerte. Tallaba quién quería dibujar porque era más fácil encontrar madera que llevar papel al monte. Madera quirosana a la que dio vida a su manera. Muchas de sus obras pueden verse en los distintos pueblos del concejo, con sus leyendas, con su sello particular, también en el Museo Etnográfico de Quirós. Los artistas permanecen vivos en sus obras y Esteban además lo hará en mi corazón, en el corazón de muchos. Descansa en paz amigo ahora tallarás estrellas.
