Publicado el: 26 Abr 2024

El PP propone externalizar el servicio de ayuda a domicilio de Belmonte

La concejala Carmen Martinez acusa al Consistorio de discriminar a los demandantes del servicio «por cuestiones ideológicas»

La concejala popular Carmen Martínez

Manuel del Sol/ Belmonte

La portavoz del PP en Belmonte de Miranda ha exhortado al equipo de gobierno a privatizar el servicio de ayuda a domicilio para poder dar cobertura a la población dependiente. Según Carmen Martínez existe un déficit de asistencia por dos motivos: la deficiente calidad de los trabajos por falta de personal y lo que considera «sectarismo» por parte del PSOE. La edil popular denuncia el abandono de varios beneficiarios durante la Semana Santa, especialmente aquellos que “ideológicamente no son afines al partido político que gobierna”, indica Martínez. Los populares detallan que de las 13 trabajadoras del servicio 5 se encuentran en Incapacidad Temporal, por razones de salud sin que el Ejecutivo local haya repuesto esas bajas, con el consiguiente sobreesfuerzo para la actual plantilla. Además, Carmen Martínez insiste en que el nepotismo predomina en el Ayuntamiento con contratos “a dedo”.

«Irregularidades graves», según el PP

El Partido Popular de Belmonte va más allá y denuncia que existe “discriminación por razones de afinidad política” y se ponen trabas en la gestión de la Dependencia o de otros servicios, y también considera que hay irregularidades en la contratación de personal técnico de Servicios Sociales, apuntando a que una de las trabajadoras fue contratada de forma directa como auxiliar, pero ejerce como técnico.  “Nos parece muy grave, una contratación  irregular que usurpa el trabajo de un profesional cualificado y que accede a expedientes clínicos sin tener cualificación”, subraya la líder del PP en Belmonte de Miranda.

El PP preguntó al alcalde de Belmonte en el último pleno por la posibilidad de completar el servicio municipal  de ayuda a dependientes a través de empresas privadas externas. Según afirman, no es una crítica a las trabajadoras, simplemente “denunciamos la carencia de profesionales”; un déficit subsanable con entes externalizados, matizan los conservadores.

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