Publicado el: 10 Feb 2018

Tres aludes aíslan a medio centenar de vecinos del Valle del Privilegio, en Teverga, con más de un metro de nieve

La alcaldesa reclama de nuevo la construcción de viseras para evitar desprendimientos en la carrera: “Es una obra fundamental y seguiremos insistiendo”

Un grupo de voluntarios se calza las raquetas para llevar el pan a los pueblos afectados y alimentar al ganado atrapado

Un grupo de voluntarios cruza sobre uno de los aludes para acceder al Valle del Privilegio, en Teverga

 

Redacción/Grao

La caída de tres aludes sobre la carretera AS-228 mantiene incomunicados desde ayer los pueblos teverganos de Páramo, La Fociella y La Villa, situados en el Valle del Privilegio. La alcaldesa del Municipio María Amor Álvarez Ardura (IU), se mantiene en contacto con el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias, a quien corresponde abrir camino en una zona en la que las acumulaciones de nieve superan los 130 centímetros. Una situación que complica el trabajo de los operarios y las máquinas que tratan desde ayer de romper un cerco que afecta a unos cincuenta vecinos. “Estamos muy preocupados”, destaca la regidora, que ha visitado la zona en varias ocasiones desde que cayeron los aludes y destaca que los servicios municipales están alerta para proceder a la limpieza de los caminos de los pueblos en cuanto quede abierta la carretera regional. Una tarea, sin embargo, que podría no completarse hoy debido a la carga de piedras que la nieve ha arrastrado consigo sobre la vía.

Para paliar la complicada situación de los vecinos atrapados, un grupo de voluntarios, entre ellos el edil del PP y presidente de la parroquia rural de Páramo, Ángel Lagar, han escalado los bloqueos para llevar el pan a los pueblos afectados. “Bajamos en todoterreno hasta el corte y luego continuamos andando”, explica Ángel Lagar, mientras se dirige, con las raquetas calzadas, a alimentar al ganado que ha quedado incomunicado. “Al menos tenemos luz y agua”, comenta buscando consuelo en una complicada situación.

Viseras contra los argayos

Además de mantenerse en contacto con el equipo regional de emergencias y tener preparados a los operarios municipales para actuar con celeridad, María Amor Álvarez Ardura reclama de nuevo la construcción de viseras que impidan que las paredes de la montaña se desplomen sobre la carretera. “Ya lo hemos hecho en varias ocasiones y seguiremos insistiendo”, indica la alcaldesa al tiempo que desea que la normalidad vuelva lo antes posible al Valle del Privilegio. “Nos han comentado, no obstante, que va ser difícil que hoy pueda reabrirse la carretera”, adelanta con preocupación la regidora.

 

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