Emoción entre los descendientes de los García Álvarez por la inclusión en el Patrimonio Cultural de la escuela de Caranga

Descendientes panameños de la familia que donó las escuelas, durante una visita a Caranga

LA ESCUELA FUE DONADA EN LOS AÑOS TREINTA POR CINCO HERMANOS ORIUNDOS DE PROAZA QUE EMIGRARON A PANAMÁ 

La noticia de la inclusión en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias de la antigua escuela de Caranga ha sido recibida con mucha emoción por los descendientes de la familia García Álvarez, quienes donaron en los años 30 del siglo XX dicho edificio para la educación pública. Desde Panamá, Roberto Lombana García, a través de un comentario a esta misma página, ha dicho que la familia García Alvarez «se siente muy complacida por la decisión por el ingreso al Patrimonio Cultural de Asturias». Su abuelo Rogelio y sus hermanos Gervasio, José, Balbino y Severo hicieron viajes entre 1930-1933 a Caranga desde Panamá para dejar como legado esta escuela y la Casa del Maestro (unos metros antes) «la cual se encuentra en estado de abandono». Esta familia tiene familiares de Villamejín, Proaza, Gijón y Oviedo y acudieron en alguna ocasión a visitar la escuela junto con el alcalde de Proaza Ramón Fernandez. Los García Álvarez, oriundos de este concejo, emigraron a Panamá, donde formaron una extensa familia que siempre mantuvo su apego a su tierra asturiana. «Hemos llevado a nuestra madre y tenemos recuerdos hermosos de nuestras visitas a familiares y todos los lugares hermosos de esa tierra. Conocimos personas muy mayores que recuerdan la escuela y a los hermanos Garcia», nos cuenta Irma de Quirós. Por su parte, Linet Lombana García se muestra «emocionada» con la inclusión de la Escuela de Caranga como parte del Inventario de Patrimonio Cultural de Asturias y recuerda que, a un lado de la antigua escuela existe una  placa que rinde homenaje a los Hermanos García.

Escuela de San Andrés

En el Inventario también se ha incluído la escuela de San Andrés (Trubia), que data de 1915. Hay otras muchas que no están incluidas en la zona de Trubia. El estudioso local Toño Huerta reseña, por ejemplor dos que considera muy importantes: Las antiguas escuelas de Bernardino Machín, hoy Centro de Salud de Trubia, obra del arquitecto Miguel de la Guardia y fechadas en 1904. Por otro lado, las antiguas escuelas situadas en la zona conocida como La Bombilla, en su día de la Fábrica de Armas; «un gran edificio de la segunda década de 1920, ejemplo de arquitectura burguesa, hoy de propiedad municipal y abandonado», explica.