
HOY SEDE ADMINISTRATIVA DE LA MANCOMUNIDAD, ES ANTERIOR A 1933 Y SU CONSERVACIÓN ES «ACEPTABLE»
La escuela de Caranga de Abajo, actual sede de la Mancomunidad de los Valles del Oso (en proceso de extinción) es una de las 120 de toda Asturias que será protegida al incluirse dentro del Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias
Para la realización de esta selección se han utilizado criterios geográficos (está representada toda Asturias), tipológicos (todo tipo de escuelas, desde las graduadas a las unitarias, con o sin vivienda, seriadas o de proyecto único, de estilo popular, ecléctico, racionalista o regionalista…) y de promoción (pública, indiana, burguesa, empresarial…). Considerando el interés patrimonial de esta selección de inmuebles la Consejería de Educación, Cultura y Deporte incoó, mediante Resolución de fecha 6 de febrero de 2014, un expediente para su inclusión en el Inventario del Patrimonio Cultural de Asturias.
En concreto la escuela de Caranga era una escuela mixta que data de una fecha anterior a 1933, según se recoge en la ficha del inventario que añade que su estado actual es «aceptable». Hoy alberga las oficinas de la Mancomunidad. Gracias a su uso y a las obras que en su día se realizaron para adaptar el edificio a este fin ha conseguido mantenerse en buen estado de conservación.
Se protege por su «innegable interés patrimonial desde el punto de vista de la formación de la identidad cultural de un pueblo, como espacios consagrados a la educación que es derecho fundamental del individuo y herramienta clave para la formación de las personas», según el texto en el que se aprueba esta inclusión.
Se pretende por ello dar carta de naturaleza a la valoración, en términos de protección, «a una realidad que tiene naturaleza “urbanística” en el sentido de que ocupa suelo y, por ello, precisa de un reconocimiento jurídico que no se limite a lo “cultural” sino que se precise y delimite en cuanto al espacio que ocupa y regule una normativa específica, la de ordenación urbanística que debe implicarse en esta acción», dice dicho texto.
Y añade: «cada escuela, es una solución única. Es el resultado concreto en cada entidad de población de una ecuación de promoción, sostenimiento, construcción, evolución, etc., que demuestra la riqueza de la escuela no sólo como tipología constructiva sino como realidad social.(…) Todas ellas, desde la más austera y funcional, hasta la más grandiosa y decorada, todas, reúnen historias singulares con vivencias colectivas en un marco constructivo de reputación social que es un referente en cada localidad, cuyo interés sólo puede equipararse en prestigio o trascendencia al templo, siendo éste el “templo del saber” que tanto costó erigir y acogió la formación de tantas generaciones».
Deja un comentario