La embajada de Francia promueve a Celso Peyroux para «Las Palmas Académicas» por sus «servicios al país galo»

Madrid / Santiago G. Sainz

Medio siglo al servicio de la cultura, la lengua, la literatura y la civilización de un país son muchos años, al menos así lo ha entendido la embajada de Francia en Madrid al proponer a Celso Peyroux para las “Palmas Académicas” y nombrarle “Caballero de Francia”.

Se trata de una condecoración instituida por Napoleón Bonaparte para premiar la labor de quienes defienden y difunden «los más nobles valores de la humanidad».

Peyroux fue profesor de lengua, literatura y civilización francesas en la Escuela de Turismo de Asturias, en la Alianza Francesa, en Haití con Mensajeros de la Paz y en el proyecto europeo “Flumen Atlántica” encuadrado dentro del programa RECITE-DOS. Fue asimismo director de centros de vacaciones y tiempo libre para la infancia y la juventud y profesor de la UFCV, del Ministerio de la Juventud y del Deporte francés. De igual forma y desde 1970, dictó numerosas conferencias vinculadas con la cultura francesa. Durante todos estos años organizó recitales de poesía en España y Francia, publicó dos ensayos sobre el poeta francés, Paul Eluard, un ensayo sobre la “Canción poética francesa”, en la Universidad de Oviedo y un poemario editado por la Unión Europea y el Principado de Asturias.

Amigos, instituciones, empresas y asociaciones francesas y españolas, bajo la coordinación de Roberto Fernández Osorio, cronista oficial de Quirós enviaron un amplio “dossier” a la embajada Francesa sobre la vida, obra y actividades del escritor tevergano. Entre los apoyos y colaboraciones se encuentran los alcaldes de la comarca Las Ubiñas-La Mesa, Cudillero, Morcín San Emiliano de Babia, el concejal del Ayuntamiento de Oviedo Roberto Sánchez Ramos, Colegio de Antiguos Alumnos de la Guardia Civil, Centro Asturiano de Madrid, Mujeres por Grado, Cronistas Oficiales de Asturias, Asociaciones de Yernes-Tameza, Quirós, Mieres, Oviedo, Las Regueras… y veinticinco municipios de la región francesa de la Charenta.

Una vez estudiado el expediente, la embajada comunicó a los organizadores que Celso Peyroux había sido propuesto ante el Gobierno francés para la mencionada distinción.

Celso Peyroux emigró a Francia en el año 1963 con dieciocho años, estudios de bachiller superior y los primeros pasos del oficio de albañil de la mano de su padre y de su tío Higinio. Echando el ancla en Burdeos trabajó como vendimiador, peón de albañil, fábricas de productos químicos y camarero de hotel al tiempo que estudiaba en el Liceo Anatole France a cuyas aulas acudía una vez terminada su jornada laboral.

Como buen deportista ingresó, para cumplir el sueño de su vida, en el “Sonneclaire-Verdeun”, equipo ciclista del que era manager y entrenador Guy Lapebie,  ganador del Tour-1937. Peyroux recorrió varias ciudades francesas: Agen, Tours, Paris, Niza, Marsella, Montauban y Toulouse realizando en todas ellas estudios superiores y diplomaturas y graduados universitarios, pero hubo de abandonar la bicicleta al no ser compatible con los estudios, regresando a Asturias a finales de la década de los sesenta.

Celso Peyroux, ha agradecido «emocionado» las muestras de afecto y los apoyos recibidos desde la embajada de Francia en Madrid,  a todas las instituciones, asociaciones y amigos que le dieron sus muestras de amistad y afecto.