La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies alerta de que el censo de 2018 contabilizó en los ríos asturianos 1.570 salmones, y se pescaron 601 ejemplares

Redacción/Grado

Los ecologistas han pedido al Gobierno regional que vede la pesca con muerte de salmón y trucha en todos los ríos asturianos «tras décadas de explotación masiva, continúan en marcado declive y en peligro de desaparición en muchas cuencas a la vista de las cifras oficiales». Ante la apertura de la temporada con muerte, este domingo, los ecologistas reclaman una veda completa, que sólo permita la pesca sin muerte, soltando a los ejemplares capturados. «Hay que recordar que el último censo otoñal de salmones (2018) arrojó los peores resultados desde que se realiza este conteo en los ríos asturianos, siendo solo 1570 los salmones contabilizados (frente a los 2471 contados en 2017), de los que se pescaron/mataron 601 ejemplares, es decir casi el 30% de la población reproductora fue la pescada», destacan.

En cuanto a la trucha, aseguran que también se aprecia un declive en las poblaciones, por lo que piden una veda similar.

«Proponemos además la suspensión inmediata de las repoblaciones de salmónidos en los ríos asturianos, ya que no están en absoluto avaladas por evidencias científicas y suponen un problema añadido a la biodiversidad de los ríos al reducir la variabilidad genética de las especies repobladas. La variabilidad genética es un aspecto fundamental para la salud y viabilidad de cualquier población animal. Las repoblaciones provocan una erosión genética en las poblaciones de salmónidos, aspecto éste bien contrastado en la bibliografía científica», defiende la Coordinadora, que también propone la creación de vedados permanentes en las zonas de desove, «a fin de que se sirvan de zona fuente para repoblar de forma natural el río».