Fernando ROMERO
[EL MIRADOR]
El parque natural de Somiedo se ha convertido en el laboratorio de los defensores del New Green Deal, un concepto diseñado desde los despachos de las grandes corporaciones para limpiar su imagen depredadora de la naturaleza y seguir ganando dinero a costa de un falso respeto al medio ambiente. La prueba la tenemos en Somiedo, en donde, en aras de las energías renovables y verdes se pretende destruir un ecosistema que ha costado mucho preservar y en donde osos, urogallos y otras especies salvajes viven tranquilas. El proyecto de un parque eólico con torres gigantes en Somiedo es un insulto al sentido común y demuestra que no se puede salvar la naturaleza destruyéndola. Los vecinos ya han salido a la calle y el conflicto será intenso si los poderes del Estado no dan marcha atrás en esta aberración, que más parece el sueño de un psicópata.
Deja un comentario