La Agenda Urbana y Rural incluye a los concejos del Camín Real de la Mesa, entre otros municipios, en la zona vinculada a la capital, que a su vez se integra además en el «área central urbana», que tendrá «una geometría variable, según el tipo de proyectos»

Redacción/ Grau

El Principado inició el pasado lunes en Navia una ronda de reuniones para plantear los objetivos de la llamada ‘Agenda Urbana y Rural’ (AURA), un proyecto que pretende articular a las distintas zonas de Asturias en ocho comarcas funcionales y con esta visión territorial fijar el marco estratégico y los objetivos concretos de desarrollo de la región, junto con los representantes de los 78 municipios. Hoy se reunió la comarca de Oviedo, que reúne a 21 concejos, entre ellos los del Camín Real de la Mesa, entre otros, y ayer le tocó el turno a los concejos del Suroccidente, en una reunión presidida por la directora general de Ordenación del Territorio y Urbanismo, Sonia Puente Landázuri.

«El Ejecutivo autonómico avanza así en el desarrollo de este nuevo marco estratégico, una vez presentado el diagnóstico de la AURA el pasado verano y tras firmar un protocolo de colaboración con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en septiembre. El siguiente paso consiste en analizar conjuntamente los retos y desafíos que tiene cada comarca y que, de forma conjunta, constituyen el futuro de Asturias. Entre sus objetivos, la AURA aspira a potenciar la actividad económica, preservar el patrimonio natural y cultural, fomentar un modelo territorial inclusivo y promover nuevos modelos de gobernanza territorial», señala el Principado.

La comarca del Camín Real se enmarca en la de Oviedo, que a su vez se integra, en el área central urbana. Esta novena área «recogerá el carácter metropolitano de la región y que contará con una geometría variable que permitirá incorporar a diferentes concejos en función del tipo de proyecto»,

El proyecto de planificación estratégica territorial se está desarrollando de forma paralela al plan de revisión normativa urbanística y territorial, iniciado con la ley de Medidas Administrativas Urgentes y el reglamento de Ordenación del Territorio y Urbanismo (ROTU), sumados a los avances en la redacción de la Ley Integral de Ordenación del Territorio (LOITA). Estas herramientas constituirán el marco legal que sustente todas las políticas territoriales en el futuro.