Los propietarios de la vivienda, en Soto de Arriba, lograron una indemnización del Ayuntamiento de 30.000 euros por sentencia judicial tras el primer derrumbamiento, ocurrido hace cuatro años, y ahora alertan del riesgo que sufren las viviendas colindantes

Marcos Álvarez/ Redacción/ Trubia

Un argayo cayó esta noche sobre un solar en Soto de Arriba, en la N-634, a la salida de Trubia hacia Sograndio. Parte de la ladera se desplomó sobre el hueco dejado por una vivienda que fue demolida por encontrarse en estado de ruina. El desprendimiento no ha afectado a la carretera, y hoy se comenzará a hacer un muro de contención para evitar su avance.

Se trata del segundo argayo que afecta a esta zona. El primero, hace cuatro años, dejó en estado de ruina la vivienda. «Cuando la ladera se desplazó la casa estaba vacía, era una segunda residencia. Quedó en estado de ruina, y el Ayuntamiento no se hizo cargo de nada, así que lo llevamos a juicio y ganamos, nos tuvieron que pagar una indemnización por daños y perjuicios de 30.000 euros», señalan los propietarios. Tras el fallo judicial, «el Ayuntamiento siguió sin hacer nada» y los propietarios decidieron demoler la vivienda por su estado de ruina, un proceso que se retrasó a causa del covid. «Finalmente hicimos las obras de demolición hace unas semanas, y el arquitecto decidió dejar la pared trasera por el precario estado de la ladera, que parecía muy endeble, para que actuara de muro de contención. Enviamos entonces un escrito alertando de que la situación de la montaña no era normal, y ahora con estas semanas de lluvias bajó un nuevo argayo y derribó el muro» lamentan los propietarios, que alertan sobre todo del riesgo que supone la ladera. «Es el segundo desprendimiento y las casas de al lado están habitadas. Hemos avisado al Ayuntamiento del riesgo de esa ladera, puede haber una desgracia», alertan.