Redacción/ Grau
Las asambleas de trabajadores de Orovalle han aprobado el preacuerdo laboral, una salida que desbloquea el largo conflicto laboral de la empresa minera de Belmonte de Miranda. El acuerdo prevé una reducción de las horas de trabajo en exterior que se aplicará de forma gradual durante tres años, y el pago de una gratificación extraordinaria por la firma del convenio, además de incrementos salariales. Se incluye, tal como pedía la empresa, la aplicación del Plan de Alcohol y Drogas: habrá controles aleatorios al 5% de la plantilla, se podrán hacer pruebas si hay signos evidentes de embriaguez, o de estar bajo los efectos de alguna droga, siempre a petición de dos responsables y en presencia de representantes de los trabajadores, y se incluirán estas pruebas en los reconocimientos médicos anuales.
La salida laboral, respaldada por los votos de una mayoría de trabajadores, llega después de más de 50 días de huelga, con protestas y cortes de carretera que dejan a más de 30 trabajadores con denuncias por la acción de los piquetes. En la negociación la empresa, impulsora de las denuncias. se comprometió a no personarse en los procedimientos judiciales.
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