El Ayuntamiento de Salas, el Principado y el Arzobispado ultiman el Plan de Usos del cenobio, tras la finalización de la segunda fase de las obras

F. R. Salas

Tras una inversión de 1,3 millones de euros ha finalizado la segunda fase de rehabilitación del monasterio de Cornellana, unas obras cruciales para poder pensar ya en los usos del edificio, ya que han consistido en la consolidación de los pisos superiores, los cierres de vanos con ventanas y galerías de castaño, o la colocación de suelos. “Ha sido un paso crucial, antes había zonas donde no se podía poner un pie, ahora ya se puede trabajar en los usos y en buscar la financiación para la tercera fase”, destaca el alcalde de Salas, Sergio Hidalgo. El plan de usos del monasterio está ya muy avanzado, tras una negociación con la consejería de Cultura y el Arzobispado. Aunque aún no está´a cerrado del todo, entre los usos del monasterio, una vez culminada la rehabilitación, está el de hospedería, con servicios de alojamiento de calidad; en el ámbito de la iglesia, se plantea reservar espacio para un salón parroquial, y también para un centro de investigación del Camino primitivo. Usos hosteleros, como una cafetería, y salas de reuniones o celebraciones, son otros de los usos del futuro monasterio, que estuvo a punto de desaparecer y que se salvó gracias a una amplia movilización social y del propio Ayuntamiento, que logró que la obra entrara en la agenda del ministerio de Cultura y en la del Principado.