Redacción/Grau
La pugna política en Belmonte de Miranda se mantiene, en una semana que comenzó con un Pleno extraordinario en el que volvió a quedar patente la falta de entendimiento institucional, al margen de las diferencias políticas. Según Belmonte Existe, los concejales de la oposición quedaron en situación de «indefensión» en el Pleno, porque «el equipo de gobierno introdujo y votó un punto que no figuraba en el orden del día, algo expresamente prohibido en un pleno extraordinario. Esta decisión provocó indefensión a los grupos de la oposición y se llevó a cabo sin que el personal responsable del asesoramiento jurídico municipal advirtiera su improcedencia o detuviera un procedimiento claramente irregular». El Pleno había sido convocado a petición de la oposición, con carácter extraordinario, para abordar el problema de una vecina que está ocasionando situaciones de inseguridad en el concejo.
Belmonte Existe asegura que «el alcalde se contradice: afirma que la ley impide añadir puntos… pero él mismo lo hizo. En declaraciones a los medios afirmó que ‘no cabe según norma la introducción de más puntos en una sesión plenaria extraordinaria’. Sin embargo, en el Pleno Extraordinario del 24 de noviembre permitió y sometió a votación un punto no convocado, exactamente lo que reconoce que la ley prohíbe. Belmonte Existe considera esta contradicción especialmente grave, ya que demuestra que el alcalde conocía la norma y aún así actuó en contra de ella», señalan.
Tras el Pleno, el grupo municipal ha presentado una batería de reclamaciones y no descarta llegar a los tribunales. En concreto, ha pedido la nulidad del acuerdo plenario, ha presentado una «queja formal ante los órganos competentes en relación con la actuación del personal técnico encargado del asesoramiento jurídico municipal, si bien su intervención ni siquiera fue requerida por el alcalde-presidente, que dirige la mesa y es el máximo responsable del desarrollo de la sesión», han pedido la intervención del Defensor del Pueblo «ante la posible vulneración de derechos de participación política».
«A estas irregularidades se suman otros hechos preocupantes: Las cuentas municipales siguen sin presentarse. Varias subvenciones permanecen sin justificar, con riesgo de pérdida de fondos. El área administrativa trabaja mañana y tarde, un esfuerzo extraordinario que evidencia un retraso muy significativo en la gestión. Desde Belmonte Existe – España Vaciada nos preguntamos: ¿La evidente paralización de los servicios municipales no será consecuencia directa de la mala gestión y la incapacidad organizativa del alcalde? ¿Por qué se acumulan retrasos tan graves en tareas básicas? ¿Qué se está intentando poner al día apresuradamente? ¿Por qué no se informa a la oposición? Los vecinos tienen derecho a saber qué está ocurriendo en su Ayuntamiento y por qué servicios esenciales están sufriendo demoras injustificadas». La formación asegura que no descarta acudir a los tribunales.
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