Publicado el: 17 Ago 2018

Los vecinos de Soto acometen la limpieza del Práu Pachu

El recinto, invadido de maleza desde hace años «está lleno de ratas y culebras» y el desbroce se efectúa tras avisar al Ayuntamiento repetidamente del peligro que supone para vecinos y conductores

 

 

El prau invadido de maleza, en primer término

Redacción / Soto de Trubia

Varios vecinos de Soto han emprendido esta semana de «motu proprio» la limpieza y el desbroce de maleza en el Práu Pachu, en el centro de la localidad. Se trata de un recinto en su día parcelado para la edificación, que al final quedó desierto y sin construir y al que, como puede comprobarse en la imagen, la dejadez y la falta de mantenimiento y cuidados han convertido en un concentrado de maleza, artos y hierbas crecidas. Desde la localidad se han dirigido repetidamente al Ayuntamiento «para que tomen medidas y avisen a la propiedad de que esto no puede seguir así», según manifiestan a LA VOZ DEL TRUBIA. «Hay ratas y culebras, los niños juegan por aquí constantemente y esto es un foco de insalubridad para pequeños y mayores». De hecho, las ramas rebasan el borde de la carretera y quitan visibilidad a los conductores de autobuses y coches que acceden al pueblo por esta zona, añadiendo el riesgo de accidente o de atropellos al desaguisado. A mayor abundamiento, la parcelación está dividida entre varias propiedades y cruzada por caminos públicos, añadiendo un problema burocrático «que requiere ir al catastro para aclarar a quien pertenece cada parte, al margen de las que son públicas», lamentan.

De este modo, foceta en mano y tras avisar a la Policía Local, diversos grupos de vecinos, cada uno de su padre y de su madre, como suele decirse, llevan desde comienzos de semana limpiando el área de matos y hierbas. Hartos de reclamar a las autoridades la necesidad de la medida, y conscientes de que «se podía hacer de otro modo acudiendo los propietarios a limpiarlo, o en su caso el Ayuntamiento, pasándoles la correspondiente factura», se han puesto manos a la obra, sabiendo que la medida es controvertida. «Hasta la parada del bus quedó tapada de maleza», protestan. «Definitivamente, no deberíamos ser nosotros los que hacemos esta limpieza, no queremos tener problemas con la propiedad, pero es que el problema real lo tenemos todos los vecinos desde hace demasiado tiempo», concluyen.

Deje su comentario

La Voz del Trubia