Delegación del Gobierno baraja un «by-pass» para rodear el argayo de Salas, por la complejidad de la obra
Los regidores de Salas, Tineo y Allande han sido convocados mañana a Oviedo para ser informados del corte de la N-634 y presentar una alternativa, que puede incluir expropiaciones
F. R. / Grado
Delegación del Gobierno de Asturias propondrá mañana a los alcaldes de Salas, Tineo y Allande, la construcción de un «by-pass» que rodee el argayo de la N-634 a la altura de Casazorrina y que mantiene cortada esta importante vía de comunicación desde el pasado 16 de abril. La medida podría suponer alguna expropiación y será una obra también complicada, debido la situación próxima al río Nonaya, aunque necesaria, dado que los trabajos para asegurar la ladera y retirar la tierra y las rocas caídas a la vía serán mucho más complejos aún.
Los alcaldes de Salas, Tineo y Allande acudirán mañana martes a la sede en Oviedo de la Delegación del Gobierno para ser informados de la situación. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha evaluado mediante datos geofísicos el deslizamiento de tierras en la N-634 en Salas. La geofísica emplea técnicas como la sísmica de refracción y la tomografía eléctrica con el objetivo de determinar en un punto de la superficie a qué profundidad se ubica la discontinuidad entre el terreno natural y las tierras deslizadas. Tomando datos en una nube de puntos, se ha llegado a estimar el volumen total de tierras que deslizó y determinar las actuaciones de reparación más adecuadas.
El corte de la N-634 está obligando a los usuarios del transporte público y privado a desviarse por tres rutas alternativas, por Soto de los Infantes, por la carretera que va por detrás del monasterio de Cornellana, la SL 7, y la local de Camuño (SL-4). Sin embargo, en esta última se forman atascos al ser muy estrecha, por lo que solo se permite el acceso a los residentes. En todos los casos hay un aumento de tiempo (la más rápida es la de Soto de los Infantes y son diez minutos más). Esta situación ha causado importantes perjuicios a la población máyor que por motivos de salud tiene que desplazarse a Oviedo, ya que tienen que pagar más por el servicio de taxi. Precisamente el día que se produjo el argayo, era la jornada que le correspondía a Salas para la vacunación de la franja de edad entre 70 y 80 años.
El argayo es consecuencia de las obras de la autovía Grado-La Espina A-63 que ya han causado otros daños colaterales, con edificios arruinados, expropiaciones y compensaciones inesperadas por el deslizamiento de una ladera en el tramo entre Cornellana y Villazón. Ya desde el año pasado, con las intensas lluvias caídas, se produjeron importantes argayos que obligaron a Demarcación de Carreteras a llevar a cabo una serie de expropiaciones en Villazón y a vallar toda la ladera. Se demostró que existía riesgo importante para esos edificios, pues meses después, nuevas lluvias arrastraron una panera ubicada al borde la carretera N-634. Más recientemente se produjo otro deslizamiento de tierra en una zona en la que había un vivienda que no se incluía entre las que se habían expropiado.