Rabia ganadera contra el Principado

Asamblea masiva para tomar medidas contra el elevado sacrificio de reses por la tuberculosis bovina

Aseguran que  el 93% del ganado sacrificado dio resultados negativos

Un momento de la asamblea

F. Romero / Oviedo

Ganaderos de la comarca, como están haciendo en otras partes de Asturias, se reunieron anoche en un local hostelero de Santa Marina de Piedramuelle, a la entrada de Oviedo, para expresar su rabia e indignación por la difícil situación por la que atraviesan debido al elevado sacrificio de reses a consecuencia de las pruebas de tuberculosis bovina.

Cerca de un centenar de ganaderos, entre ellos algunos exdirigentes sindicalistas, mantuvieron una asamblea abierta y participativa, que duró hasta muy avanzada la noche, en la que expresaron sus quejas, algunas muy agrias, y que se van a traducir en inmediatas movilizaciones. Los principales ataques fueron contra los veterinarios del Principado y también contra los responsables de la Consejería de Desarrollo Rural.

Abrió el turno de palabras el portavoz de la ganadería Diego y María, de Las Cuestas (Trubia) y uno de los convocantes de la asamblea quien dijo que la razón del encuentro es «porque nos están dando por todos los lados». Presentó a  Manolo Suárez, coordinador de USAGA de Asturias y ganadero de Quirós.

Suárez dijo que las medidas que se estaban tomando en cuanto a los sacrificios animales «nos están llevando a todos a la ruina» por lo que pidió unión para presionar porque «uno a uno se consigue poco». Destacó que en el aspecto del saneamiento ganadero «la Administración hace lo que quiere» y recordó que los expertos hablan de que el 93% de los animales sacrificados en Asturias por presunta tuberculosis dieron resultados negativos «pero pagamos nosotros lo que hacen mal ellos».

El sindicalista pidió a la asamblea tomar ya acuerdos para tener clara la estrategia de lucha a seguir antes de ir a la Consejería y pedir una entrevista al director general de Ganadería.

Desde los asistentes una ganadera dijo que el problema es que «nos hablan de pruebas clínicas que no entendemos pero lo que hay que conseguir es que no se sacrifiquen tantas vacas cuando son un 7% las que están enfermas. Se burlan de nosotros».

El exsecretario general del sindicato UCA, Joaquín López, que asistió invitado a título individual, asegura que los técnicos de la consejería «no saben leer las pruebas» y que en Navarra, País Vasco y Cataluña, lo están haciendo bien sin tantos sacrificios. Además añadió que «es mentira que Europa pidiera ésto».

Se incidió en que tanto la fauna salvaje, como el ganado menor, también son portadores de la bacteria y que podrían estar contagiando a las vacas «pero eso no lo miran».

El ambiente era tenso y de «no aguantar más» por lo que la mayoría estaban por «movilizarse ya y planarnos en la Consejería» aunque insistieron en que lo primero que hay que hacer es cambiar la legislación porque «nos acusan y no nos dejan defendernos». Uno ganadero quiso hacer por su cuenta pruebas a los animales que le sacrificaron «y no me dejaron·».

En cuanto al calibre utilizado para tomar decisiones de sacrificar a las vacas, Joaqun López explicó que no se puede cambiar porque viene de Bruselas «lo que hay que hacer es cambiar el protocolo y la mentalidad de los que la aplican».

Surgieron entonces las críticas hacia los veterinarios del Principado, e incluso se llegó a decir que si se estaba sacrificando tanto animal era para mantener los puestos de trabajo del equipo de veterinarios «que no son funcionarios»-.

López recordó que la prevalencia de la tuberculosis en Asturias es de un 0,2, por debajo de otras comunidades autónomas y añadió que con estas medidas «están hundiendo al sector para que cuatro vivan muy bien» en referencia a los veterinarios, «porque si las pruebas no salen positivas van a la calle».

Otro de los temas de los que se habló anoche fue de las «amenazas» y el «miedo» que se inspira desde el Principado hacia los ganaderos respecto a este asunto y se criticó la actuación del Principado «que es como Dios, nunca se confunde ni rectifica».